Su directora, Cynthia Aguirre, trabaja en proyectos de investigación sobre el cuerpo y la creación coreográfica
Sin descuidar sus presentaciones en teatros o festivales, ni sus talleres para niños y grupos vulnerables, la Compañía de Danza Contemporánea Danzarena de la ciudad de Chihuahua no ha descansado de sus investigaciones sobre el cuerpo y la creación coreográfica.
Cynthia Aguirre, su directora, refiere que no ha cejado como maestra desde 1997, cuando volvió de La Habana, Cuba. A partir de entonces invita a egresados de algunos centros de capacitación dancística para investigaciones y entrenamientos en lenguaje contemporáneo.
En ese mismo año, la directora artística se benefició con la beca estatal David Alfaro Siqueiros para llevar en el norte del estado algunos proyectos sobre investigación de movimiento en el tema de creación coreográfica, con la obra Los desiertos florecen, la cual fue presentada en municipios como Cuauhtémoc y Delicias.
Asegura que en los últimos años las actividades de la agrupación se han centrado, también, en llevar la danza como una forma terapéutica del lenguaje y las formas de comunicación para niños autistas en Chihuahua.
Los ocho integrantes del grupo también han realizado diferentes giras con presentaciones en festivales o encuentros coreográficos de Monterrey, Torreón y Durango, lugares con bastante vida dancística.
Esta va construyéndose con las preguntas que los actores detonan y las respuestas del público para decidir si se une a ellos y sube al escenario, para juntos construir una pieza que los enfrenta a quienes permanecen sentados.
Por último, señala que en esta obra no solo se trabaja con la desnudez física, sino también emocional, ya que los espectadores y los actores abren y comparten sus experiencias dolorosas en el escenario.