No sé qué vaya a pasar en el encuentro, hace semanas que se vivió, pero no de esta manera En la noche me impresionó, pero ahora me asustó, y es que... ¿qué podría decir mi amada de un hombre tan estremecido como yo? Le escribí una carta, donde revelaba aquellas palabras de esos días que se ocultaban, pero he decidido sacarlas a la luz Porque es la única manera en la que yo me puedo delatar con ella, toqué su mano hace un mes y mañana besaré su boca y es lo que me asusta Cuando se unen los labios, el mundo se vuelve uno solo, todos los universos se encuentran y son incapaces de gritar Solo es disfrutar del momento; planeo agarrarle la mano y decirle lo mucho que la amo, que seré su verdadero universo, aquel que disfruta Sé que mi amada es experimentada, y sé que yo soy un pobre hombre en desgracia, pero ella se fijó en mí Y es lo que constantemente me llego a preguntar, ya que soy un alma barroca; no llego a innovar mi vejez; me quedé en un solo punto cardinal Pero el encuentro no se trata de exponer aquello que es nuestro, es una revelación, una cápsula de emociones encontradas, una explosión de cariño Mañana tocaré la mano de mi amada, nos sentaremos en el parque San Juan de la CDMX; no sé a qué horizonte vamos a llegar, o qué batalla vamos a luchar Hace días que los amantes dejaron ir a su musa, pero hace noches que los reveladores decidieron declararse y el encuentro es mañana Prendan velas, oren por el nacimiento de una nueva historia, mañana mi amada y yo sabremos si estamos destinados el uno para el otro Porque el encuentro está en un sendero, el sendero está en un velero, y el velero se verá en ese beso.
Sebastián López
@sebs_lopez