Para rematar los vehículos que eran utilizados por los senadores, la Cámara alta abrirá un proceso de licitación.
La Junta de Coordinación Política instruyó a la Secretaría General de Servicios Administrativos a realizar el proceso para enajenar las unidades que ya no son de utilidad para el Senado.
De acuerdo con un documento firmado por los coordinadores de las bancadas, serán rematados los vehículos que tengan un «desgaste considerable», y cuyo costo de mantenimiento represente una carga para la Cámara.