ESTÉNTOR POLÍTICO
Miguel Ángel Casique Olivos
Este jueves, en la conferencia mañanera que ofrece el licenciado Andrés Manuel López Obrador, al presentar algo de los avances sobre lo que será su plan para entregar apoyos «sin intermediarios», dijo que aunque se hagan manifestaciones o plantones, no se va a atender lo que él considera son los culpables de que los apoyos «no se entreguen» a los beneficiarios; como ya hemos señalado en este espacio, culpa a las organizaciones sociales.
¿Algún mexicano no recuerda lo que pasó hace 12 años en Reforma, avenida principal de la Ciudad de México?, ¿alguien no recordará que tras perder las elecciones en 2006, López Obrador instaló un plantón permanente?
El perdedor en aquel entonces, ahora presidente de México, encabezó un plantón en la capital del país, según como protesta por el resultado de las polémicas en las elecciones que le dieron el triunfo a Felipe Calderón Hinojosa. En esas elecciones el PAN fue declarado ganador con 14.91 millones de votos, mientras que Obrador obtuvo 14.68 millones, en realidad, no era mucha la diferencia, pero el había perdido.
El bloqueo que arrancó el 30 de julio, y que se dió tras un espectáculo donde AMLO se autonombró «presidente legítimo» y dijo: «les propongo que nos quedemos aquí, en asamblea permanente… que permanezcamos aquí, día y noche, hasta que se cuenten los votos y tengamos un presidente electo con la legalidad mínima…» Entonces ahora, ¿por qué razón o bajo qué circunstancia Obrador, que se dice democrático, no va a aceptar que se realicen plantones o los piensa ignorar?
Parece que su posición sobre las protestas públicas como recurso que tienen, aún, los mexicanos y que está garantizado en nuestra Carta Magna, se verá acorralado y posiblemente se quiera cancelar. A López Obrador no se le debe olvidar que, tanto las manifestaciones y tras ellas la instalación de plantones, son el último recurso que tienen los mexicanos para hacerse escuchar cuando se han cometido muchas injusticias y atropellos contra ellos.
López Obrador piensa que sus cambios implican modificar todo, incluido la cancelación de los derechos que todo ciudadano tiene y que le han permitido exigir a sus gobernantes, en los tres niveles, cuándo ellos no gobiernan para el pueblo. El derecho a la manifestación y de realizar plantones, se ve seriamente amenazado por el gobierno morenista; los mexicanos deben estar muy alerta para ver qué giro va tomando la política de López Obrador, y deben estar listos para defenderlo porque, la protesta pública, las manifestaciones y los plantones, siguen siendo armas de lucha social.
En 2006 López Obrador no decía que las manifestaciones y los plantones no servían, al contrario, él mismo usó esos recursos a pesar de la inconformidad social que existía por cerrar Reforma. Ahora el presidente mexicano parece que aplica la máxima de: «Hágase la voluntad de Dios, pero en los bueyes de mi compadre».
El clímax no político…
La Atenas de la Mixteca sigue de fiesta con la XX Espartaqueada Cultural Nacional 2019. El domingo y lunes miles de mexicanos disfrutaron de melodiosas voces con la disciplina de música; el martes, el arte de la palabra, Oratoria, hizo su aparición con temas nacionales e internacionales como la educación, caso Venezuela y política de México que impactaron a los asistentes y, este martes 6 de febrero, 24 horas o mil 440 minutos de poesía conquistaron la mente y corazón de los asistentes del Auditorio «Clara Córdova Morán» y el «Foro Sol». Antorcha sigue impulsando la cultura y el arte.
Y en otros temas, el gobierno federal envió a 10 mil 200 elementos de la policía federal, militar y naval a 17 regiones del país, por ser consideradas las más violentas. Alfonso Durazo, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, destacó que éstas concentran el 35 por ciento de los homicidios registrados en el país; pero si los delitos y la inseguridad siguen igual. ¿No? Por el momento, querido lector, es todo.