NEVADA, EUA.- La familia de Corbin Madison, el adolescente de 18 años que se suicidó en Nevada luego de que trascendiera que su maestra Tennille Whitaker, lo había violado a él y a otros tres compañeros, demandó a las autoridades escolares por no tomar acción a tiempo para evitar el patrón de abusos.
En el 2018, luego de que Whitaker, hoy con 41 años, fuera arrestada, Madison se disparó en una camioneta como resultado de la humillación y la depresión que le provocó la divulgación del caso, reportaron medios locales.
La hoy convicta, que es madre de dos, cumple 20 años de prisión tras ser sentenciada en octubre pasado, informó El Diario NY.
El recurso legal denuncia que superiores de Wells High School hicieron caso omiso a las alegaciones contra la maestra.
La demanda menciona, específicamente, al entonces director del plantel, Chris McAnany, a quien se le habría advertido al menos seis veces entre principios de 2016 y marzo de 2017 que Whitaker mantenía “relaciones sexuales prohibidas con estudiantes menores”. Otros empleados, sabían de las acciones de la educadora desde mucho antes, y se menciona la fecha de septiembre de 2015.
El documento judicial al que hace referencia el Daily Mail indica, además, que los encargados de la escuela “intencionalmente ignoraron en múltiples ocasiones las denuncias relacionadas con Whitaker que permitieron que Whitaker acosara, molestara y abusara de niños por varios años”.
Según la información, la maestra les daba regalos y alcohol a cambio de intercambios sexuales en la escuela y en hoteles.
En el juicio también trascendió que la agresora tenía un “espacio privado de lectura” en la sala de clases que no era visible desde el pasillo o las ventanas para cometer los actos prohibidos.
La maestra tuvo sexo en horas que no había clase con cuatro estudiantes -todos menores- y los designaba como sus ayudantes en el salón. La profesora incluso se sentaba sobre las rodillas de Madison.