El boxeador mexicano Juan Francisco Estrada, sin poder contener las lágrimas ante los recuerdos que llegaron como una ráfaga de golpes, dejó en claro que como campeón supermosca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) aún sueña con más logros.
La historia del “Gallo” parece trágica, pues cuando era niño perdió a su mamá y a su papá, pero fue adoptado por su tía “Lupita”, quien años más tarde, cuando el pugilista ya era profesional, también murió.
Pero el sonorense, un guerrero arriba y abajo del ring, nunca dejó de luchar por sus sueños hasta ser campeón del mundo, lo que prometió a su tía.
Faltaba concretar uno de sus sueños, que era conquistar el título del CMB, y lo hizo el pasado 26 de abril tras vencer al tailandés Srisaket sor Rungvisai.
“Es algo por lo que hemos luchado mucho tiempo, por ser campeones del CMB, fue mucho trabajo, sacrificio, entrenamiento, recordamos la vieja historia que tenemos, lo que hemos pasado, fue eso lo que me llegó”, dijo en entrevista con los medios.
Tras recibir el título que lo acredita como campeón de las 115 libras del organismo verde y oro, Estrada resaltó que el pugilismo es una carrera de sacrificios, entrega, disciplina, “es lo que hemos tenido, he sufrido mucho en la vida, logramos ser campeones del mundo”.
Cobijado por su mánager Juan Hernández y por el promotor Fernando Beltrán, la promesa que hizo a su tía de que sería monarca mundial lo ha hecho fuerte en su carrera deportiva, siempre con el recuerdo de ella y también el de sus padres.
“Prometiste algo que quieres lograr, algo que pocos hacen, eso al momento me da fuerza, siempre la recuerdo a ella y a mis padres”, dijo el “Gallo”, quien en lo deportivo tiene claros sus objetivos: unificar títulos y concretar la esperada pelea con Román “Chocolatito” González.
“Quiero al campeón de la FIB, el filipino Jerwin Ancajas, unificar con él o sino pelear con Román a finales del año, veremos que dice el equipo de trabajo”, comentó Estrada, al aseverar que no le negará la oportunidad a nadie rumbo a una posible revancha con Srisaket, pero “preferiría unificar títulos”.
Tras sufrir molestias en la mano en la pelea con el tailandés, le recomendaron tres o cuatro semanas de descanso, por lo que espera pronto retomar sus entrenamientos con normalidad y tener dos peleas más este año, en agosto o septiembre y una más en diciembre.
Mauricio Sulaimán, presidente del CMB y que hizo entrega del cinturón a Estrada, calificó como emotivo el evento realizado en Lomas de Chapultepec, “cuando las lágrimas y los sentimientos afloran de esta manera entiendo la razón de ser del CMB”.
Y concluyó: “reafirma nuestro compromiso para seguir sirviendo a los boxeadores, nos motiva para buscar que nuestro deporte avance, es la realidad de un niño que pierde a sus padres, luego a su madrastra también; pudo tomar el camino de las drogas o el vandalismo, pero cambió todo por seguir en el gimnasio y ahora es campeón del CMB”.