Por Clara Espinosa
El pasado 25 de octubre, el profesor Nelson Vargas Basáñez y todo su equipo de trabajo celebraron los triunfos de sus atletas, gala que se hace para todas las categorías, pero más que una entrega de premios, refiere a estimular la excelencia, celebrar los resultados y compartir como la familia deportiva que somos.
En dicha cita, estarán algunos de los medallistas panamericanos, quienes hoy son el referente más grande de la natación en México, a ellos, a sus triunfos, disciplina, familias y resultados, se les entregará un minuto de lo que merecen, un reconocimiento de corazón, una ovación de parte del
futuro de la natación del país y, sobre todo, un elogio a esos bronces continentales que tantas alegrías nos brindaron.
Adicionalmente el Profesor Vargas, será el anfitrión de esos padres y deportistas que hoy trabajan incansablemente por los sueños de los más pequeños, dándose a conocer que se dará un significativo premio a los mejores desde la categoría 7 y 8 años en ambas ramas.
Para completar dicha ceremonia, se hará un reconocimiento especial a los entrenadores, quienes ponen sus conocimientos, empeño y disciplina para que estos resultados se den; pero, más que eso, se hará un trascendental anuncio, los premios incluyen a los entrenadores extranjeros, quienes ponen en nuestros mexicanos sus sapiencias para la conquista de preseas, que al final se traducen en amor a nuestro país, nuestra bandera, nuestra entrega y trabajo.
Antes de concluir, es significativo destacar que al profesor David Quintero Azuara, le será entregado un reconocimiento por ser considerado el mejor presidente de Asociación de Natación en el país, esto derivado de sus significativos triunfos en lo que refiere a los resultados deportivos obtenidos, en: natación, clavados y nado sincronizado.
Para finalizar, el profesor Vargas afirma, que: “… Este es un acontecimiento con más de tres décadas de celebración, soy de los que trabaja en este suceso, simplemente por el amor y la entrega que vivo en cada programa deportivo con los atletas, entrenadores y familias; ellos merecen que se les celebré, pero más que eso valen cada minuto de amor y reconocimiento
que le demos a su trabajo y su conducta por este deporte olímpico de gran complejidad y de muchos sacrificios…”.