El presidente Andrés
Manuel López Obrador anunció que se utilizará “toda la fuerza del Estado”
para combatir las adicciones, por la vía de la atención, información y
prevención, sin medidas coercitivas o sólo pensando en la prohibición o
legalización de sustancias. En este punto dijo a los jóvenes que hay
alternativas más allá de ser “halcón” del crimen.
En conferencia de prensa matutina, el mandatario
puntualizó que si bien no se descartan otras vías y estrategias, confió en el
éxito de este plan presentado el pasado 5 de julio. Anunció que “por un tiempo”
las campañas de difusión de su gobierno se enfocarán sólo en ese tema, que
significa – expresó- un infierno para los consumidores de drogas y sus
familias.
Señaló que pese a los estragos del modelo neoliberal, de afectación a las familias, el fenómeno se puede revertir en nuestro país, cuya circunstancia – aseveró- no se puede comparar con el contexto en Estados Unidos, por ejemplo.
Al informar sobre la campaña en contra de las adicciones que emprende su gobierno, el presidente indicó que «no se descarta» legalizar el consumo de mariguana o de «otras drogas».
En este sentido, precisó
que su gobierno está iniciando con el combate a drogas más dañinas.
“Se puede decir: ‘esto no va a funcionar porque
se requiere legalizar las drogas’. No se descarta, pero estamos iniciando
con esto, porque es lo más dañino; está demostrado que la adicción a estos
químicos mata, destruye y vamos a enfrentarlo de esa manera, atendiendo primero
lo preventivo”, dijo.
Comentó que se están analizando todas las
opciones, empero, «no estamos iniciando por la legislación porque
consideramos que ese no es el problema central».
El mandatario advirtió que el alto consumo de drogas
fue un saldo y herencia de los gobiernos neoliberales. Lo mismo, añadió,
la desintegración familiar, la corrupción y la violencia. Es por ello que van a
“visibilizar” el problema.