Decenas de familias indígenas yaquis quedaron damnificadas debido a la inundación de la comunidad de Vícam, en Sonora, donde un temporal ha causado lluvias torrenciales y tormentas.
Desde la semana pasada, en la región han ocurrido lluvias torrenciales a diario con fuertes rachas de viento de hasta 70 kilómetros por hora (km/h) que derrumbaron árboles, postes de energía y el techo de lámina o cartón de las viviendas.
Mario Luna Romero, vocero de la Autoridad Tradicional de Vícam, considerada la capital de la nación yaqui, informó que las zonas afectadas por la inundación de las viviendas son La Nopalera, Termoeléctrica y Sebastián González.
En estas localidades las familias tuvieron que ser evacuadas y buscar un refugio en la escuela primaria habilitada como albergue.
«El agua pluvial se metió a bastantes casas, algunas de ellas se han quedado sin techo, hay pérdidas materiales, personas que lo han perdido todo, además que con el agua muchas viviendas de adobe quedaron cuarteadas y podrían derrumbarse», aseguró Mario Luna en entrevista para el medio local La Diferencia Informativa.
Las autoridades tradicionales indígenas advirtieron que además de perder su patrimonio, decenas de familias tienen en riesgo su salud por las temperaturas que superan los 40 grados centígrados y pueden provocar enfermedades asociadas al calor extremo.
Actualmente, autoridades del Gobierno mexicano se encuentran en negociaciones con representantes de la etnia para el Plan de Justicia para el Pueblo Yaqui que prometió el presidente Andrés Manuel López Obrador y que tiene como objetivo restituir su territorio y recursos naturales.