La Policía de Estonia ha prohibido la celebración de cinco concentraciones en las calles de la capital, Tallin, con motivo de los festejos de la victoria de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi en la II Guerra Mundial que se celebran el 9 de mayo en Rusia, Bielorrusia y algunas de las antiguas repúblicas de las URRS.
Las autoridades han argumentado posibles “provocaciones” y “amenazas potenciales”, pues en años anteriores algunos de los símbolos que se enarbolaban ahora son utilizados para justificar la “guerra de Rusia en Ucrania” y que Estonia ha prohibido, como la cinta de San Jorge, o las letras ‘Z’ y ‘V’.
Estas concentraciones públicas “pueden incitar al odio” y si bien “honrar la memoria de los muertos en la Segunda Guerra Mundial no está prohibido” no debe utilizarse esta onomástica “para incitar a la violencia”, por lo que ha recomendado ofrendas alternativas, como “encender velas” o “llevar flores al cementerio”, ha explicado la prefectura de Pohja, uno de los distritos en los que se divide Tallin.
Por el momento, ya han sido cancelados dos eventos previstos para el 26 de abril, fecha en la que tradicionalmente se hacen ofrendas florales y discursos en Tonismagi -en pleno centro de Tallin- donde fue erigido en 1947 el Soldado de Bronce, monumento soviético con mucha carga simbólica tanto para detractores como para sus partidarios.
Otras tres manifestaciones han sido también canceladas el 9 de mayo, fecha en la que se conmemora el Día de la Victoria tanto en Rusia como en varias antiguas repúblicas soviéticas el triunfo de la URSS sobre la Alemania nazi en la II Guerra Mundial o la Gran Guerra Patria, como se conoce por esas latitudes.
Los organizadores de estas movilizaciones han adelantado que intentarán apelar la decisión de la Policía pues “han demostrado que no pueden garantizar el orden constitucional”, ni “los derechos de su gente”, según declaraciones para la televisión pública estonia ERR.