La falta de presupuesto como resultado de la austeridad que se implementó en el presente sexenio, retomada por la Jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum, viene afectando severamente la operación del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, pues los recortes limitan la compra de equipo nuevo, herramientas y refacciones, por lo que persiste la corrupción en el medio de transporte más importante para los capitalinos, donde se mueven diariamente más de cinco millones de usuarios.
Esta situación contrasta con el hecho de que la Jefa de Gobierno cada fin de semana se ausenta de la Ciudad de México (CDMX), dejando en claro que el interés de la funcionaria es su precampaña de cara al proceso electoral de 2024 con la anuencia del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
La propia jefa de Gobierno ha intentado responsabilizar a las anteriores administraciones por los incidentes y hechostrágicos ocurridos en el Metro, sin embargo, se da un tiro en el pie, ya que la “izquierda” ha gobernado la capital durante los últimos 25 años, primero como Partido de la Revolución Democrática (PRD); el propio AMLO y Marcelo Ebrard fueron Jefes de Gobierno.
El desplome de la Línea 12, ocurrido el tres de mayo de 2021, la remodelación de la Línea 1, que inició en julio de 2022 y cuya infraestructura rebasaba el medio siglo, han hecho que las demás líneas se saturen, situación que ha convertido en un caos el transporte en calles y avenidas de la CDMX, congestionando vialidades y provocando la desesperación entre los usuarios que requieren un medio de transporte para trasladarse a sus centros de trabajo, hospitales, escuelas y otras actividades.
“El Metro es la espina dorsal del sistema de transporte en la CDMX, lo que está viviendo ahora es una cirugía bastante delicada”, señala el exdirector de ese medio de transporte, Jorge Gaviño Ambriz, al referirse a los accidentes, incendios y choques de trenes ocurridos en lo que va de esta administración en ese medio de transporte.
Los accidentes se registran casi a diario; uno de los más recientes ocurrió la noche del lunes nueve de enero, dos días después del choque de trenes de la Línea 3, cuando usuarios de la Línea B del Metro fueron desalojados y a través de redes sociales compartieron el motivo: una explosión y humo en la estación Nezahualcóyotl. Esta situación se repite constantemente en casi toda la red.
A la fecha, el Metro presenta un recorte presupuestal sin precedente, en contraste, las obras que se realizan en las Líneas 1 y 12 han sobrepasado sus presupuestos. Las promesas de terminar a tiempo los trabajos de remodelación no se han cumplido y los incidentes han aumentado en la mayoría de las líneas.
El Proyecto Metro Energía para abastecimiento eléctrico de las líneas 1, 2 y 3, con una inversión de cuatro mil 500 millones de pesos, a cargo de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y del Sistema de Transporte Colectivo Metro. La modernización integral de la Línea 1, con una inversión de 37 mil millones de pesos y el reforzamiento y rehabilitación del tramo elevado de la línea 12, así como el mejoramiento del tramo subterráneo y el nuevo Puesto Central de Control son los que presentan retrasos e incremento presupuestal.
Gaviño Ambriz reconoce que “en estos momentos el Metro está atravesando por una situación compleja que ha generado dificultades en su operación”. Agregó que la rehabilitación de las líneas está generando “presión” en otras para su operación”.
Sheinbaum redujo el presupuesto
Durante la gestión de Claudia Sheinbaum como Jefa de Gobierno de la CDMX, los accidentes han crecido en 70 por ciento, es decir, unos 612, según información vía transparencia publicada en medios de comunicación.
La falta de mantenimiento en toda la red de este sistema de transporte se atribuye a la política de austeridad de este gobierno, así lo evidencia la asignación presupuestal, aunque la Jefa de Gobierno diga lo contrario. Como resultado de esta política, los usuarios padecen casi a diario el retraso de vagones, cortos circuitos, apagones y, en temporada de lluvias, inundaciones y filtraciones de agua; los accidentes fatales tampoco escasean, por ejemplo, el ocurrido la mañana del siete de enero en la Línea 3, entre las estaciones La Raza y Potrero.
Roberto Remes, exautoridad del Espacio Público explicó a buzos que de las 11 líneas que están operando, es notorio el alto número de rezagos, particularmente en la Línea 3, que corre de Universidad a Indios Verdes y es una de las más antiguas.
En enero de este año, el informe de México Evalúa Gobernanza y financiamiento para el STC Metro: asunto de vida o muerte, señala que al tercer trimestre de 2022, el gasto total para el Metro tuvo un recorte de 13 por ciento, es decir, unos mil 589 millones de pesos, comparado con el mismo periodo del año pasado.
“En 2021, el gasto había experimentado un impulso (luego de la caída de la Línea 12), pero en 2022 se volvió a caer. Además, lo gastado en 2022 al tercer trimestre fue inferior en uno por ciento (57 mdp) al gasto al tercer trimestre de 2017. Es decir: hay un estancamiento presupuestal que no se ha superado”, asegura el documento.
En ese mismo periodo –al tercer trimestre–, la asociación civil advirtió que “el avance del gasto es de solo 55 por ciento de los 18 mil 828 millones de pesos presupuestados para todo el año. Difícilmente se logrará cumplir el plan anual”.
Sin duda, es en el gasto en “herramientas, refacciones y accesorios menores” donde más ha pegado la austeridad, pues hasta septiembre del año pasado el gasto en este rubro “fue de 201 mdp, 59 por ciento (295 mdp) inferior al mismo periodo de 2021, y el peor monto de que se tenga registro desde 2017. Por otra parte, el gasto de servicios de instalación, reparación, mantenimiento y conservación acumula 903 mdp, un siete por ciento (67 mdp) por debajo del tercer trimestre de 2021. Además, dicho gasto es inferior en 10 por ciento (102 mdp) al de 2017. No ha habido avance en el presupuesto de mantenimiento en casi un sexenio”, puntualizó.
Frente a la indiferencia de la Jefa de Gobierno para atender este sistema de transporte, alcaldes de oposición interpusieron una denuncia contra Claudia Sheinbaum y el director del Metro, Guillermo Calderón, ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX). La alcaldesa de Álvaro Obregón, Lía Limón, explicó que el Metro perdió el 20 por ciento de su presupuesto real de 2018 al 2022. Además detalló que en el último año de Miguel Ángel Mancera se destinaron 18 mil 973 millones de pesos al Metro. El monto se incrementó a poco más de 20 mil millones en 2019, pero cayó drásticamente en 2020 y 2021, con un promedio de 16 mil 500 millones de pesos.
En 2022 y 2023 el presupuesto quedó prácticamente en los niveles de 2018, con 18 mil 800 millones en cifras redondas. De ese año a la fecha, la inflación acumulada ronda el 20 por ciento, de ahí la pérdida de presupuesto en términos reales. Esa es la razón de la crisis que hoy vive ese medio de transporte.
Roberto Remes, exautoridad del Espacio Público, explicó a buzos que el presupuesto más importante de los últimos años para el Metro se asignó en 2016, cuando Miguel Ángel Mancera, era Jefe de Gobierno. “Si quitamos inflación, el mayor presupuesto fue el de 2016; pero digamos, de 2015 a 2018 son presupuestos muy similares”, indicó. Descontando la inflación, el presupuesto de 2023 es inferior sustancialmente al presupuesto de los años 2015 a 2018. Sin embargo, Remes detalló que de 2019 a 2021 hubo un recorte muy importante en el presupuesto del Metro, el cual comenzó a revertirse en el presupuesto de 2022, como respuesta a la caída de un tramo de la Línea 12 del Metro en mayo de 2021.
En las 11 líneas que operan es notorio que hay un alto número de rezagos y particularmente en las Líneas 3, donde se registró recientemente un fatal choque de trenes; la Línea 7, que tiene periodos de espera muy elevados; y la Línea B, desde siempre rezagada en su estándar de operación, con una alta demanda pero con los trenes más antiguos de la red.
“La actualización de la Línea 1 del Metro es un buen proyecto y sí va a dar lugar a un mejor servicio. No obstante, eso no resuelve los problemas de las otras líneas. Me parece que los riesgos seguirán altos los siguientes meses; y paulatinamente habrá mejoras en el servicio conforme se asigne Presupuesto de manera adecuada a la red del STC Metro”, señaló en entrevista.
Oídos sordos y muerte en el Metro
La mañana del sábado siete de enero se registró un choque entre dos trenes en la Interestación Potrero-La Raza; el saldo: una joven fallecida identificada como Yaretzi, alumna de la licenciatura en Artes Visuales de la Facultad de Artes y Diseño de la UNAM y 106 lesionados.
La tarde del siete de enero, las autoridades del gobierno capitalino reportaron que hasta ese momento había 59 personas heridas; sin embargo, dos días después, los usuarios que resultaron con alguna molestia y acudieron a diversos hospitales para un chequeo médico dieron testimonios de haber estado en el choque de la referida línea, por lo que esas mismas autoridades tuvieron que reconocer que la cifra de heridos había subido a 106.
Los dos trenes que chocaron habían presentado constantes fallas en su operación, sobre todo en los sistemas de tracción-frenado, de pilotaje automático, de puertas, cajas y equipos mecánicos, reveló el especialista en movilidad, Víctor Alvarado, quien señaló que debido a esas fallas ambos trenes habían salido cientos de veces de operación entre los años 2012 y 2021.
A través del STC Metro, el especialista detalló que se trata de trenes modelo NM-83ª, que eran carros construidos por la empresa Concarril y que tenían una antigüedad de 30 años.
El especialista explicó en redes sociales que si la configuración de los vagones no ha cambiado, uno de los trenes involucrados fue el 424/469. El convoy 424, dijo, salió de operaciones mil 497 veces entre 2012 y 2021.
En ese periodo de 10 años, el tren salió de operación 557 veces por problemas en el sistema tracción-frenado; otras 215 veces por fallas en el sistema de pilotaje automático y otras 173 por desperfecto en el sistema de cajas.
Además, registró 157 fallas en el sistema de puertas, otras 135 en los equipos mecánicos y 71 en el sistema de mando y control. Por otro lado, el tren 424 también reportó problemas en el sistema de generación de aire y de energía, en la señalización y registro, así como en el equipo de comunicación.
Víctor Alvarado detalló que en el caso del segundo posible tren involucrado, se trató del 414/415.
“Si la configuración de vagones no ha cambiado, también su principal salida de operación de 2012 a 2021 ha sido por un tema de sistema de tracción-frenado, aunque en menor incidencia”, explicó.
Alvarado indicó que el tren 414 salió 930 veces de operación en ese periodo de 10 años, información recabada como parte de sus investigaciones. Durante esa década, dicho convoy registró 248 fallas en el sistema tracción-frenado, 164 en el sistema de pilotaje automático, 135 en equipos mecánicos y 106 en el sistema de puertas.
Además, salió de operación 85 veces por problemas en el sistema de cajas, 47 por desperfectos en el sistema de mando y control, y otras 39 por fallas en el sistema de generación de energía.
Pasajeros denunciaron desde octubre del año pasado que algo ocurría entre las estaciones Potrero y La Raza, justo donde ocurrió la tragedia el pasado siete de enero de 2023.
Las denuncias fueron hechas a través de redes sociales, donde los pasajeros se quejaban de las constantes fallas en trenes, en vías y una sistemática lentitud en el avance de los convoyes cuando pasaban por ese tramo. En sus mensajes, usuarios que abordan esa línea arrobaron a las cuentas del Metro, de Claudia Sheinbaum y del GobCDMX para externar sus quejas y dejar en evidencia que nada se hacía para atender los reportes.
El usuario de Twitter @audiogalaxy se dio a la tarea de recabar mensajes de pasajeros, luego del choque del sábado siete de enero, donde se quejaban de problemas en el tránsito de convoyes, justo entre Potrero y la Raza.
Entre los mensajes se leía: “Otra vez la Línea 3. Usuarios reportan estar atrapados en la intersección La Raza-Potrero más de 30 minutos. @Claudiashein anda con todo”. En otro: “hay un tren averiado entre la Raza y Potrero, hasta que lo quiten van a reanudar el servicio en Línea 3, que pésimo servicio @MetroCDMX pero para sus marchas sí están buenos”.
El cinco de diciembre un pasajero, se quejó en sus redes sociales: “@MetroCDMX en Metro La Raza huele a quemado, saben por qué?? Y en Metro Potrero y Metro Hidalgo no hay luz en ciertas áreas”. Dos días después, el siete de diciembre, otra usuaria se quejó por la lentitud en el paso de los trenes, al señalar: “#MetroCDMX no sé por qué L3, siempre después de Guerrero el Metro se queda parado en las estaciones y los túneles dirección Indios”, en referencia a la estación Indios Verdes.
“En la mañana lo mismo, (estación) 18 de Marzo, Potrero, La Raza y Guerrero son las estaciones más atascadas de gente y los trenes super lentos en ese tramo”, denunció otro usuario. Esa queja fue recurrente entre pasajeros. Así quedó de manifiesto en el mensaje del usuario @opuenteb, quien acusó: “De la Raza a Potrero 9 minutos, avanza unos metros y se detiene y esto es muy frecuente, un buen comunicado del representante del Metro estaría bien. Pero claro el recurso para mejorar se va a otro lado, tantita madre”.
El 11 de noviembre, el pasajero @toscanogio69 se quejó de lo mismo, al acusar: “@MetroCDMX hay problemas en Indios Verdes que se tiene que estar parando antes de llegar a estación La Raza??? Potrero y 18 de Marzo???”. Otros pasajeros se quejaron también de la lentitud en los trenes del Metro.
Prácticamente desde fines del año pasado, a través de carteles en taquillas de diversas estaciones del Metro, el Sindicato acusó al director Guillermo Calderón Aguilera de no comprar herramientas y otros aditamentos necesarios para la correcta funcionalidad del STC.
Frente a un incremento en el presupuesto del Metro de 19.3 millones de pesos para este año, lo que representa apenas 0.1 por ciento respecto al año pasado, el Sindicato Nacional de Trabajadores del Sistema de Transporte Colectivo (SNTSTC) ha solicitado al Congreso de la capital tres mil 500 millones de pesos extras para mantenimiento de la red de transporte.
La semana pasada, un grupo de mujeres encapuchadas ingresó a la estación Chabacano de la Línea 9 del Metro para realizar pintas en las que acusaba a Claudia Sheinbaum Pardo y demás autoridades de la CDMX por la muerte y afectaciones a los usuarios. “Ni perdón ni olvido. Memoria digna para los usuarios fallecidos”, fueron algunas de las pintas que realizaron las manifestantes.
Silencio en torno a trenes siniestrados
Luego de los numerosos percances ocurridos en el Metro durante los años 2020 y 2021, las autoridades del STC Metro se han negado a revelar detalles sobre los trenes siniestrados en la Línea 3.
El argumento de las autoridades del STC Metro y de Claudia Sheinbaum es que esa información está en poder de la Fiscalía capitalina, que realizará una investigación para determinar las causas de la tragedia.
La Fiscal Ernestina Godoy también ha dicho que en brevedad informará sobre las causas del choque, sin precisar fechas.
Luego del choque de los dos trenes en la Línea 3 del Metro, la Jefa de Gobierno de la CDMX, no aclaró los motivos del choque entre trenes, dejando más dudas respecto a la tragedia.
En una conferencia de prensa, la funcionaria se negó a responder preguntas y en un breve mensaje dijo que el más grave de los lesionados era el conductor del tren que se impactó contra otro convoy en el túnel entre las estaciones Potrero y La Raza.
Partidos de oposición han exigido que Claudia Sheinbaum pida licencia ante muertes de su administración, como los 26 fallecidos de la Línea 12, y que la Fiscalía General de la República (FGR) se sume a las labores de peritaje que realiza Ernestina Godoy, con el objeto de avanzar y llegar a la verdad, frente al tortuguismo que hay para no manchar la candidatura presidencial de la Jefa de Gobierno. Del mismo modo, han solicitado a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), intervenir y emitir algún tipo de pronunciamiento a favor de las víctimas, no solo de la Línea 3, sino de la llamado Línea Dorada y demás personas que han fallecido en ese medio de transporte.