El ataque de un grupo armado durante el jueves 4 de enero contra la comunidad de Buenavista de los Hurtado en Guerrero, de poco menos de 100 habitantes, conmocionó a México por ser la primera masacre del 2024.
El sacerdote y director del Centro de Derechos de Víctimas de Violencia “Minerva Bello”, José Filiberto Velázquez, informaba en sus redes sociales el saldo de las víctimas; en una primera versión hablaba de 30 muertos, pero luego de trasladarse al lugar constató y actualizó las cifras.
Fue hasta este sábado que contabilizó cinco cráneos dentro de una camioneta totalmente calcinada. Previamente, la noche del viernes, circuló un video donde un grupo de hombres presumía cuerpos desmembrados durante su incursión en la comunidad perteneciente al municipio de General Heliodoro Castillo.
La desconfianza hacia las autoridades ha llevado a que pobladores que reconocieron a sus familiares en ese video hayan reclamado a los elementos de seguridad -que arribaron al lugar- “los restos calcinados y sin identificar”, comentó el párroco José Filiberto Velázquez en entrevista con esnoticiahoy.com.
Narró que Buenavista ha sido desplazada con “ataques constantes” y la ausencia del Estado en Guerrero ha obligado a las comunidades a tomar las armas para defenderse, en esta ocasión de la expansión de La Familia Michoacana hacia la sierra, donde ya existe otro grupo criminal denominado Los Tlacos.
Fueron atacados “pobladores que son originarios de ahí [Buenavista de los Hurtado] y Tetela del Río haciendo tareas de seguridad; por la ausencia del Estado, han tomado las armas para defenderse de La Familia Michoacana -que utiliza todo lo que puede como los drones y hombres armados- y a los que habían ido a levantar su cosecha”, comentó.
En el conflicto, explica Velázquez, que lleva más de un año en esta magnitud “la población es la que queda en medio y tiene que defenderse, y son criminalizados”. “Solamente cuando suceden cosas así viene la presencia de la seguridad pública” pero “ellos exigen que se mantengan en esos lugares para regresar a sus actividades como ganaderos, campesinos, pescadores, etc.”.
“Llegó la fuerza pública para saber lo que estaba pasando, pero ya se van como si nada hubiera pasado”, denunció.
El sacerdote ha señalado al grupo criminal La Familia Michoacana como autores de los recientes ataques por lo que ha pedido al gobierno de la morenista Evelyn Salgado Pineda mantener “la seguridad que se les ha solicitado y que se han comprometido” con Buenavista y “otras comunidades que están igual de vulnerables”.
Al menos 14 personas están desaparecidas, confió José Filiberto Velázquez a este medio, la figura más importante que es la voz de la comunidad ante el silencio que guarda el gobierno estatal y federal.
Cuestionado sobre si la violencia podría agudizarse durante el próximo proceso electoral respondió: “Claro, indudablemente”.
Ha invitado a los lectores a observar las fotos y dar seguimiento de los ataques que sufren los guerrerenses con el incremento de la violencia en la entidad.
“Puedes ver la primaria destrozada, los ataques de bala”.