Evo
Morales está bajo resguardo y con vigilancia de militares mexicanos,
mientras que la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) aseguró
que no correrá riesgos en la protección del exmandatario, luego de que le
concedieran asilo político ante los reclamos de la oposición.
El presidente López Obrador reveló que él
instruyó que se ofreciera asilo a Evo Morales tras el llamado “golpe de Estado”
ante las acusaciones de que Morales influyó en las elecciones de octubre para
buscar su cuarto mandato, lo que desató una crisis política en Bolivia.
El Mandatario federal aseguró que se siente muy orgulloso de garantizar el derecho de asilo que México ha concedido de forma histórica en momentos de crisis.
Ante las críticas a la decisión de dar asilo al boliviano, López Obrador afirmó que el país ha dado asilo en el pasado a perseguidos de “todas las corrientes de pensamiento”, mientras que en el país se iniciaron campañas con firmas para exigir que se le retire el asilo al depuesto Presidente boliviano.
La petición en change.org creada a las 15:00 horas este lunes ya acumulaba 18 mil 238 firmas tres horas después. En el documento, los inconformes afirmaron que la política del Gobierno federal es selectiva, pues reprocha a unos gobiernos y muestra simpatía a otros.
“Entiendo que haya personas, ciudadanos que no estén de acuerdo con lo que está llevando a cabo el Gobierno que represento, respeto ese punto de vista, el derecho a disentir, pero también quiero que comprendan que estamos realizando una transformación, que no vamos a seguir en el camino trillado de siempre”, señaló López Obrador.