- Se exhiben obras de Cristóbal de Villalpando, Leonora Carrington, Germán Gedovius, Manuel Ocaranza, Diego Rivera, Julio Ruelas, Rufino Tamayo, David Alfaro Siqueiros y Julio Galán, entre otros
La muestra se divide en cuatro núcleos temáticos: La pérdida del Paraíso, La noche del alma, La sombra de la muerte, y Los hijos de Saturno, bajo la propuesta curatorial de Abraham Villavicencio García
Obra plástica de 80 artistas mexicanos, que va del siglo XVI al XXI, forma parte de la exposición Melancolía, que abrió sus puertas al público la noche del 4 de abril, en el Museo Nacional de Arte (Munal).
La melancolía, un estado del alma que ha sido estudiado a través de la historia por diversas disciplinas como la filosofía, la medicina y el arte, es la temática de la exhibición temporal integrada por 137 piezas, entre pinturas, grabados, esculturas y publicaciones.
Con piezas de artistas como Cristóbal de Villalpando, Leonora Carrington, Germán Gedovius, Manuel Ocaranza, Diego Rivera, Julio Ruelas, Rufino Tamayo, David Alfaro Siqueiros, Julio Galán, entre otros, se aprecia la exploración de emociones melancólicas y sus implicaciones en el arte, así como referencias al pecado, la creación, la espiritualidad, la muerte, la culpa, la magia, el duelo y el desamor.
Al asistir al acto inaugural, la titular de la Secretaría de Cultura, María Cristina García Cepeda, destacó que en la muestra se verán autores, corrientes, escuelas, técnicas y épocas que mantienen como hilo conductor la mirada del artista ante su mundo interior y el peso de la realidad ante la existencia humana.
Agregó que la exhibición tiene como tema central el estado del alma que los antiguos griegos relacionaron con la bilis negra, ese humor que circula por el organismo, que causa tristeza y genialidad. Un estado que provoca un inagotable impulso a la introspección, a la reflexión y a la creación artística.
“La fuerza imaginativa de la melancolía ha sido tanta que ha conquistado el imaginario social de diversas épocas y lugares; se colocó en el cruce de las artes y el pensamiento como una forma de explicar la subjetividad humana, y el origen de la creatividad, desde entonces ha inspirado numerosas obras literarias y artísticas y es fuente de una rica iconografía”, expresó García Cepeda.
La muestra se divide en cuatro núcleos temáticos: La pérdida del Paraíso, La noche del alma, La sombra de la muerte, y Los hijos de Saturno. La propuesta curatorial de Abraham Villavicencio García hace una revisión de las distintas maneras en que la melancolía ha sido representada en el arte mexicano, desde la época virreinal hasta nuestros días.
En el recorrido se destaca la postura melancólica, haciendo referencia a la pose de personajes sentados que apoyan el peso de su cabeza sobre su mano, generalmente a la izquierda, gesto que alude a diversos estados de ánimo tales como el ensueño, el agotamiento, el decaimiento o la reflexión profunda.
Asimismo se percibe el paisaje melancólico, el cual se asocia a un sentimiento que puede desprenderse del entorno que rodea la existencia del hombre: el cielo nublado, la naturaleza otoñal, lo que crea ambientes tristes, desoladores, inquietantes y solitarios.
Otro elemento presente en las piezas es el anochecer, representado como un ambiente siniestro que envuelve a los personajes, sus acciones, expresiones y atributos, así como la muerte que se identifica con componentes iconográficos como calaveras o cráneos, temáticas como el luto, la angustia, la desesperanza, la desolación, el desconsuelo, el duelo e incluso el suicidio.
Melancolía exhibe piezas de la colección del Munal y de otras 44 colecciones públicas y privadas. Entre las piezas que se destacan son dos de Francisco Dosamantes que no se habían mostrado antes y que forman parte del acervo del Museo: La espera, y Tragedia.
La muestra Melancolía, expuesta en el primer piso del Museo Nacional de Arte, estará en exhibición hasta el domingo 9 de julio, con horarios de martes a domingo de 10:00 a 18:00 horas. $60 admisión general. Entrada gratuita a menores de 13 años, personas con discapacidad, estudiantes, maestros y adultos mayores afiliados al Inapam. Los domingos la entrada es libre.