Por: Trinidad González. El Banco de México en su reporte trimestral dijo que durante los primeros meses, la economía mexicana tuvo una afectación de gran magnitud debido a diversos choques ocasionados por la inflación. Aunque, pronosticó un crecimiento en los siguientes meses de entre 1.5 y 2.5 por ciento del PIB.
En este contexto, añadió que en los meses pasados la economía mexicana continuó con su proceso de recuperación al inicio de 2017, reflejando un repunte de la inversión, la producción industrial y el comercio global.
No obstante, el escenario previsto de un crecimiento global moderado para 2017 y 2018 sigue enfrentando riesgos a la baja derivados de la elevada incertidumbre sobre el rumbo de la política económica en países avanzados, de que parecen haberse incrementado las vulnerabilidades de la economía de China.
“Como consecuencia de ello, se prevé una mayor expansión del PIB para 2017 en su conjunto, de modo que se ajusta el intervalo de pronóstico para ese año de uno de entre 1.3 y 2.3 por ciento, a uno de entre 1.5 y 2.5 por ciento”, refiere el Banco de México que preside Agustín Carstens.
A pesar del relativamente favorable desempeño de la actividad económica a inicios de 2017, las cifras más recientes apuntan a cierta desaceleración de la actividad productiva en los próximos trimestres.
Finalmente, adelantó que para 2018, no se modifica respecto al Informe previo el intervalo de pronóstico de un crecimiento del PIB de entre 1.7 y 2.7 por ciento, de modo que se sigue previendo un mayor ritmo de expansión de la economía respecto a 2017.