Barcelona. Cataluña hoy se paralizó. La huelga general convocada por los partidos independentistas, las plataformas civiles, los sindicatos y las agrupaciones juveniles logró que las actividades empresariales, públicas y estudiantiles de la región se suspendieran en señal de protesta por la brutal represión del pasado domingo, cuando un operativo policial ordenado por el gobierno español del derechista Mariano Rajoy dejó un saldo de casi 900 heridos y una indignación popular por la violencia y el ataque a la libertad de expresión y de voto.
Las principales carreteras de Cataluña se cerraron, la actividad comercial prácticamente se paralizó en toda la región, ninguna escuela pública abrió sus puertas, numerosos comerciantes medianos y pequeños decidieron de motu propio no abrir sus locales y hasta grandes corporaciones, como el F. C. Barcelona, decidieron no realizar actividades de ningún tipo en señal de protesta. Es la manera en que el pueblo de Cataluña expresó su indignación y su profundo malestar con el operativo policial del pasado domingo, con el que el gobierno español intentó evitar que se celebrara el referendo de independencia que finalmente se llevó a cabo y que cosechó una aplastante victoria de los partidos soberanistas, que alcanzaron más del 90 por ciento de los votos a favor de convertirse en una república independiente.
La convocatoria de la huelga fue de una plataforma cívica, Taula de la Democracia, que agrupa a partidos políticos, sindicatos, asociaciones y agrupaciones profesionales que se sumaron sin dudarlo a un paro de labores que colapsó las principales ciudades de la región. En Barcelona prácticamente ningún pequeño y mediano comercio abrió sus puertas, los servicios de transporte público funcionaron al mínimo rendimiento, la mayoría de los grandes comercios no abrieron sus puertas y los que lo hicieron fueron objeto de denuncias por parte de los huelguistas.
Pero la movilización más importante se dio de nuevo en la calle. Decenas de miles de personas salieron en las principales ciudades para expresar su rechazo frontal a la presencia de los policías españoles en Cataluña. En Barcelona la principal concentración se registró en la Plaza de Cataluña, pero sobre todo en la Jefatura Superior de Policía de España, que desde ayer por la tarde está siendo asediada por miles de jóvenes que exigen su salida inmediata de la ciudad por la represión.
También hubo grandes protestas en Girona, Lleida, Tarragona y otras localidades pequeñas, que enarbolaron la bandera de la independencia y gritaron de nuevo alto y fuerte: “Vergüenza”. Que ha sido uno de los lemas que se han entonado en los últimos días en alusión a la brutal represión que dio la vuelta al mundo y que todavía sigue provocando un enorme malestar en la ciudadanía de Cataluña.
Asimismo se registraron concentraciones de repulsa ante las sedes de los partidos políticos que han respaldado el operativo policial, Ciudadanos, que es el principal partido de oposición en Cataluña, y el Partido Popular (PP), que gobierna en España y es el principal responsable de la represión del pasado domingo.
Por ese operativo, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) anunció la presentación de una moción de reprobación a la vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, a la que señalan como la ejecutora del plan de actuación. La reprobación tiene opciones de prosperar, una vez que la mayoría de los partidos políticos de oposición han expresado su rechazo enérgico a una represión que ha dado la vuelta al mundo por su violencia innecesaria.