ESTÉNTOR POLÍTICO
Miguel Ángel Casique Olivos
Escuchamos ayer decir al presidente de México, Enrique Peña Nieto, que de aquí al 1 de julio se privilegien las propuestas y no los dimes y diretes, y que tiene deseos de que el entorno de las campañas políticas sea de prioridad a las propuestas, constructivas y positivas para el futuro desarrollo que tenga el país, y no la «polémica» (agresiones y ataques) que siempre se suscitan en toda campaña política-electoral.
Fuera o no presidente de México, cualquier mexicano medianamente educado y que desea vivir en un país próspero y con un futuro diferente a lo que diariamente viven 120 millones de mexicanos, estaría de acuerdo con esas declaraciones del presidente mexicano: que en lugar de los dimes y diretes se privilegien las propuestas que garanticen un desarrollo económico, político y social de México, tante en el interior como en el extranjero.
Porque…, acaso ¿alguien sabe la razón de por qué en tiempos electorales siempre salen a relucir y se «destapa» toda una serie de corruptelas, mal uso de recursos y abuso de autoridad de los gobiernos y políticos o tráfico de influencias?, ¿será que en tiempos normales, fuera de campañas, nadie se da cuenta de que eso existe?
El mal uso de los recursos públicos, tráfico de influencias, actos de corrupción, desvío de recursos, y más, siempre se han dado; podría asegurarse que es propio de este sistema político en el que México está sumergido. Entonces, cuando vemos que se publica un video donde se acusa a Ricardo Anaya de lavado de dinero no debe sorprendernos, tampoco debe preocuparnos que de inmediato el candidato salga a declarar o a decir quiénes son los culpables de haber filtrado ese ataque y de inmediato culpar al alguien, en este caso al Presidente de la República y a decir abiertamente que lo meterá a la cárcel de llegar a la presidencia. ¿En serio se hará eso, o sólo son arranques de ira y de prepotencia políticas de un derechista que quiere gobernar nuestro país?
Nada de eso debe asombrarnos pues tras la difusión de ese video, donde se dan detalles del tipo de operaciones que se hacían con Ricardo Anaya, la tarea la tiene la Procuraduría General de la República y las autoridades correspondientes, y se comenta que una de las primeras acciones tienen que ser, citar a declarar a Juan Carlos Barreiro y lo mismo tendría que hacer la fiscalía queretana para investigar el posible tráfico de influencias en el que se haya incurrido.
Una sorpresa verdadera sería que este tipo de información no se publicara en tiempos electorales, sino cuando se presenten los hechos; otra sorpresa sería ver que los cuatro candidatos en realidad se pusieran a debatir y a presentar a los mexicanos propuestas de fondo para cambiar la triste y lamentable situación de pobreza y miseria en México; pero eso no sólo es imposible, sino que ninguno lo tiene en su agenda de prioridades; hoy que se realizará el último de los debates, mayoritariamente veremos ataques entre ellos.
Y hablando un poco más sobre el tema, se comenta ya que el ejercicio de esta tarde ya solo es para reafirmar la percepción de que hay un puntero, pues se ve muy lejos que alguno de los otros tres participantes, tras las agresiones verbales y la guerra de videos, logre subir a un segundo lugar. También se ve complicado que López Obrador quiera entrar al ring de Ricardo Anaya y José Antonio Meade.
El escenario que pinta para esta tarde de debate parece así: López Obrador irá con un tono de tranquiiiliiidad y trataaaraaá de encaminar sus palabras a temas, que ahora sí «interesen» a la ciudadanía, pero que ya nadie le cree y es demasiado tarde tarde para cambiar la mala percepción que se ha generado con sólo tomar como bandera a la corrupción. Por otro lado, veremos a un panista y un priista que hablarán sobre la cuestión económica del país, pero seguramente reinarán los ataques entre ambos, sin que se logre un puntero para el segundo lugar Del Bronco ya se conoce su estilo: se divertirá un poco con los tres y al final no dirá nada, pues es el competir más débil.
Si los primeros debates no modificaron en nada las tendencias, nada se podría hacer en este, ya ni siquiera el voto útil se ve que vaya a beneficiar a José Antonio Meade o a Ricardo Anaya. Para esta tarde, queridos lectores, pueden ir preparando sus palomitas o definidamente programar alguna otra actividad, quien no lo vea o escuche, no se perderá de nada.
El clímax no político...
Se sabe, según el reporte de gastos que se rinde al Instituto Nacional Electoral, que Ricardo Anaya ha gastado en encuestas y en propaganda alrededor de 81 millones 883 mil pesos. En tres semanas se sabrá si esto sirvió para algo o como también se verá en los demás candidatos, fue dinero tirado a la basura.
Se comenta que hoy arranca en el Inai el foro de Transparencia y Acceso a la Información de Personas Físicas y Morales, donde se explicará cuáles son las obligaciones de transparencia de quienes reciben y ejercen recursos públicos de programas sociales como es el caso de Prospera. Los detalles ahí estarán y ser dará a conocer cómo se realizará la supervisión de esas actividades para rendir cuentas, sobre todo se comenta que habrá mecanismos para mejorar la vigilancia sobre el fin que tienen esos apoyos millonarios. Por el momento, querido lector, es todo.