ESTÉNTOR POLÍTICO
Miguel Ángel Casique
Lo que vaya a pasar con los partidos políticos, grandes y los llamados «Chiquillada», durante el próximo gobierno de López Obrador y Morena, también tendrán que ver en cómo se vaya comportando el gobierno entrante y cómo vaya dando solución a las tantas promesas que realizó el tabasqueño durante su campaña y durante los cinco meses que transcurren antes del 1ro. de diciembre.
Y será así porque, tanto el PRI como el PAN, que eran las fuerzas más grandes, ahora se ven mermados tras la debacle electoral; pero, lo que se alcanza a ver es que no están sufriendo una verdadera transformación en su interior y que con asegurar que su actuar será diferente durante el próximo sexenio; es más, con estos institutos políticos también se aplica la máxima de que si no avanzan o no se transforman si la realidad se mueve, no sólo se estarían estancando, sino que estarían retrocediendo.
Y esto es así porque hemos visto en los últimos días como en el PRI seguirá en su dirigencia la ya conocida Claudia Ruiz Massieu, y aunque tiene buena intención y no es mala operadora, lo cierto es que no parece que vaya a realizar algún cambio de fondo: y es que, también, el aún presidente en turno, Enrique Peña Nieto, no se le ve ninguna intención de querer participar en un cambio de fondo en el Institucional y él mismo ha dicho que «el PRI necesita cambiar de nombre y de esencia», y esto que es completamente cierto, en el priismo no se ve quién vaya a lograr ese cambio.
Por otro lado hemos visto como Ricardo Anaya durante los últimos días ha estado visitando y reuniéndose con gobernadores panistas tratando de influir para que Santiago Creel ocupe la dirigencia de Acción Nacional al menos durante un año; pero parece que la reacción de los gobernantes en turno es que no están muy de acuerdo, fundamentalmente porque aún no quieren tener problemas con López Obrador y es por la sencilla razón de que Santiago Creel, viene su memoria, fue de los que impulsó el desafuero del tabasqueño.
Lo que sí parece eminente es que Miguel Ángel Mancera, ex jefe de gobierno de la Ciudad de México, trae en su cabecita y mente crear un nuevo partido político que rescate (sic) a «la izquierda», según se comenta, porque ya no habría quien represente a esa parte política, ¿será que Mancera, tras su paso como jefe de gobierno, en donde no dejó buen sabor de boca, pueda tener el respaldo popular para dirigir un partido?. También quien ha estado movidísima por crear un partido político es Margarita Zavala, pues ya está casi lista para lanzar la convocatoria y su idea es crear un partido político «nuevo» que retome los postulados que el PAN olvidó y del cual formó parte.
Pero, con la posible creación de ambos partidos, se podría ver ya como dos políticos, Mancera y Margarita, intentarían un destape muy anticipado para lanzarse como candidatos a la presidencia para el 2024, y hay quienes comentan que ambos políticos pudieron haber dado más en estas elecciones, pero no fue así; el primero porque aceptó dejar para después sus aspiraciones presidenciales y Margarita, fue relegada y muy atacada por Ricardo Anaya.
Ante estas intenciones, es preciso recordar que un partido político es una herramienta en manos de una clase social o grupo político con intereses económicos y políticos comunes, cuyo propósito central es la conquista del poder político; pero otra característica es que sigue siendo un medio para materializar, en la vida política, los principios y programa de acción del partido de que se trate.
Y aunque todo esto es en teoría, también no se debe olvidar que al formar un nuevo partido político lo más importante y relevante sería saber si recogerá los verdaderos intereses de una sociedad en su conjunto o al menos de un sector amplio; cosa que no se vería por ningún lado ni con el partido de Miguel Ángel Mancera, ni con el de Margarita Zavala; pues uno sale del PRD con orígenes viejísimos de priismo, el otro, seguirá siendo un partido con orígenes de derecha. Entonces, en México seguirá haciendo falta un verdadero partido que represente a los pobres de la patria, que salga de la entraña misma del pueblo para que no traicione a los mexicanos y mucho menos manipule la realidad, tal y como ha venido ocurriendo con todos los partidos existentes.
El clímax no político…
Este jueves el INE aprobó la bolsa de 4 mil 965 millones de pesos como financiamiento público para partidos políticos en 2019 y la distribución se va a realizar hasta que se conozca el futuro de los partidos Encuentro Social y Nueva Alianza que sigue latente la pedida de su registro.
Quienes sí están muy enojados son los habitantes de Chimalhuacán, pues los presidentes municipales, el actual y el electo, César Álvaro Ramírez y Jesús Tolentino Román Bojórquez, piden en una misiva al gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo Maza, su intervención a favor del municipio mexiquense de Chimalhuacán, con el propósito de que la empresa OHL México cumpla el compromiso que firmó en el año 2011 de construir dos puentes vehiculares en ese municipio.
Comentan que desde hace siete años, el 28 de abril de 2011, poco antes de que se inaugurara el Circuito Exterior Mexiquense, la empresa OHL firmó un acuerdo con el Ayuntamiento de Chimalhuacán en el sentido de que se construirían dos puentes vehiculares que conectarían a dicho circuito con el territorio municipal de Chimalhuacán. Como testigo de dicho acuerdo firmó el Lic. Luis Enrique Miranda Nava, Secretario General de Gobierno del Estado de México en aquel año. Han transcurrido más de siete años y OHL no ha construido ninguno de los dos puentes vehiculares; lo único que existe es un pequeña y angosta vía de conexión, que además resulta peligrosa para los automovilistas.
Así, ante este incumplimiento y la arrogancia de los funcionarios de OHL, el pueblo unido y organizado de Chimalhuacán ha decidido emprender una lucha para obligar a dicha empresa a cumplir lo pactado, por eso hoy viernes 24 de agosto, 5 mil ciudadanos se manifiestan en las oficinas de OHL en la ciudad de México, para solicitar que muestre su responsabilidad social como empresa, y cumpla con su compromiso de construir los dos puentes vehiculares a que se comprometió desde hace 7 años. Por el momento, querido lector, es todo