- Especialistas se remontan a la historia de ciertos instrumentos con enfoques etnográficos y antropológicos
- Piedra papel y tijera: instrumentos en la ciencia en México fue presentado en la FIL de Guadalajara
Una amplia reflexión sobre las múltiples interpretaciones de lo material en su relación con la dimensión política y las personas que interactúan mediante el uso de los artefactos –de donde emana un complejo devenir que es difícil de visualizar– ofrece la obra Piedra papel y tijera: instrumentos en la ciencia en México.
Un conjunto de estudios centrado en la historia de varios objetos utilizados para construir, comunicar y ampliar conocimientos científicos comprende esta publicación, mencionó el doctor Martin Larsson, investigador del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav).
Al presentar el texto en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, Larsson destacó que se trata de una amplia reflexión de las múltiples interpretaciones de lo material, en tanto su relación con la dimensión política y las personas que interactúan mediante el uso de los artefactos, lo cual emana de un complejo devenir que es difícil de visualizar.
El título alude a que “las tijeras tienen al mismo tiempo el poder de romper el papel y de ser destruidas por la piedra, en otras palabras, es de gran interés para los investigadores profundizar en el momento en el que los objetos fueron definidos, no sólo en su esencia”, así que también puede referir una serie de textos sobre el debate existente en torno a lo material.
La doctora Miruna Achim, profesora del Departamento de Humanidades de la Unidad Cuajimalpa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), compartió con el auditorio la idea original que dio paso al libro y que se vincula con el quehacer de la doctora Laura Chazaro García, del Cinvestav, quien “es la principal impulsora de este trabajo resultado de un proyecto en el que ha estado involucrada alrededor de siete años y al que fui invitada para participar al lado de varias alumnas de doctorado”.
La doctora Nuria Valverde Pérez, investigadora de la Unidad Cuajimalpa y otra de las editoras de la publicación, comentó que un gran valor de la obra es que se remonta a la historia de ciertos objetos con enfoques etnográficos, históricos y antropológicos, ya que “en los últimos años parece que somos usuarios poco reflexivos de la tecnología”.
Esto ha creado una escisión entre la economía y la política, cada uno de los objetos abordados demuestran que no se mueven de manera independiente de esas variables. Las subjetividades de las comunidades, por ejemplo, no se crean al margen de las tecnologías, por el contrario ayudan a construirlas, “algo que nos permite vislumbrar de lo que somos capaces con los recursos que hallamos a nuestra disposición”, concluyó.