Por: Donato Márquez
El ciclo agrícola en el Estado de México ha iniciado y con ello la urgencia de miles de campesinos de empezar a fertilizar la tierra, ahora ya no produce como antes, coinciden quienes han trabajado por años y sobreviven gracias al campo, por lo que “abonar” la tierra, como ellos dicen, les ayuda a mejorar sus tierras y con ello su producción. Sin embargo, hoy no tienen el fertilizante que recibían hace años, el gobierno del Estado de México se ha negado a entregar los insumos como parte del programa para apoyar a miles de campesinos.
Sobreviven principalmente del maíz, y el temor de los campesinos es que se queden sin el alimento básico. Juan Pedro Coahuayana, representante de los campesinos agremiados al Movimiento Antorchista en el Estado de México muestra su preocupación por la cerrazón gubernamental, una política de oídos sordos que ha llevado a miles de campesinos a protestar en la capital mexiquense, y por la que incluso ya preparan otra para el próximo 28 de marzo con 50 mil antorchistas, pues la nula atención, afecta lo mismo a campesinos, colonos, estudiantes, maestros y los municipios de Ixtapaluca y Chimalhuacán.
En entrevista, el dirigente social detalla la problemática que enfrentan unas cien mil familias. “Los campesinos que estamos organizados en Antorcha hemos entendido que no hay otra forma para que el Gobierno nos haga caso, por ello nosotros nos estamos organizando y movilizando porque es justa nuestra demanda, la pobreza y la miseria en que vivimos no da para más y el Gobierno tiene la obligación de asistir las necesidades de la gente más pobre, la más humilde. No pedimos que nos regalen nada, nosotros sabemos trabajar, solamente pedimos que nos apoyen con estos insumos, nosotros sabemos trabajar la tierra, sabemos organizarnos y este es un derecho que tenemos como pueblo pobre. Somos un sector agraviado por el gobierno del Estado de México”, reiteró.
-¿Cuáles son las necesidades que padecen los campesinos, que los ha obligado a salir a las calles?
La demanda principal por la que nosotros nos estamos movilizando es que el gobierno del Estado de México no ha querido cumplir con el acuerdo de apoyar a los campesinos del Valle de Toluca, de la región de Atlacomulco, de la región de Tierra Caliente, de la región de Villa del Carbón y de la región de los Volcanes, por Amecameca, con el fertilizante que año con año se ha apoyado. Son alrededor de cien mil campesinos que eran beneficiados con este apoyo y han quedado fuera de los apoyos oficiales de Secretaría de Desarrollo Agrario (Sedagro), porque son trabajadores sin tierra propia y su producción es para el autoconsumo, entonces, la situación está muy delicada porque ya es momento de que los campesinos se pongan a sembrar, la demanda principal es el fertilizante.
-¿Qué implica para los campesinos el hecho de que no haya una respuesta favorable por parte de las autoridades, hablemos del gobernador, de la secretaría a cargo?
Con este apoyo, los campesinos pueden verse beneficiados económicamente ya que producir una hectárea de maíz cuesta entre 25 o 30 mil pesos, o un poco más si se le mete insumos y fertilizantes y básicamente un campesino termina sacando de una hectárea de maíz cerca de cuatro a seis toneladas, y la tonelada de maíz está entre cinco o seis mil pesos, básicamente le sale lo mismo, no hay ganancia. Pero, ¿qué si se logra? Se logra tener el maíz para el consumo de la familia para el próximo año y es el riesgo, un riesgo de hambruna, un riesgo en que más de cien mil familias no va a tener maíz para mantener a su familia el próximo año.
El dirigente social añade que los campesinos no pueden comprar los insumos porque son muy caros. Ejemplifica que para producir una tonelada de maíz, se requiere un insumo que conocen como de “edad 18”, que es una materia que se usa para sembrar, y en el mercado se encuentra alrededor de 11 mil 500 pesos, por ello, el fertilizante que el Movimiento Antorchista gestiona y que el gobierno ha venido otorgando, es un buen apoyo, porque prácticamente está garantizando que con la mitad pueden ellos trabajar sus siembras. Reiteró que en el caso de los apoyos para el campo los recibe directamente los campesinos.
-¿Cuáles fueron los compromisos que hizo el gobierno del Estado de México?
El compromiso es con todo el campesinado del estado mexiquense, ellos tienen su agenda. Pero ni a los campesinos antorchistas ni al campesinado en general les han dado nada y esto es una cuestión muy difícil, sobre todo porque también los apoyos que venían comúnmente de Procampo también se han visto mermados y la situación sí es complicada. El gobierno del estado hizo el compromiso formal de apoyar a los campesinos como lo venía haciendo, con el apoyo del fertilizante. Nosotros a finales del año pasado metimos la petición y hemos acudido en enero, en febrero y en estas primeras semanas de marzo para que cumplan con su palabra pero hay una negativa total por parte del gobierno del estado.
-¿De cuánto fue el recorte para el campo mexiquense y en qué repercute?
Nosotros estamos calculando que son 25 mil a 30 mil toneladas de fertilizante las que se dejarían de invertir en el campo mexiquense. El cambio fundamental es que se ha fracturado un esquema de trabajo donde sí se le apoyaba al campesino, aunque a regañadientes, hoy la incertidumbre está en que el gobierno ya a ningún nivel tiene el compromiso de apoyar al campesino. Con los recortes que ha habido desde la federación, los gobiernos estatales se escudan diciendo que no hay recurso y el afectado es el campesino común y corriente, la gente que trabaja, ellos se preguntan dónde está el cambio, dónde está la “Cuarta Transformación” porque ahora se ven peor. Ahora el gobierno estatal se escuda diciendo que no hay dinero y por las noticias los campesinos escuchan de que van a llover los apoyos, y no hay nadie que les diga que les garantice, que se va a lograr su apoyo. Sólo Antorcha Campesina está con los campesinos y que es la organización que los protege y los avala en esta gestión.
En representación de los miles de campesinos, es tajante: hay una diferencia, hoy está peor. El año pasado todavía se hacían acuerdos y se cumplía, hoy no. El gran problema es que se habla por los medios de comunicación, pero a la gente no le llega nada concreto, no le llega apoyo de maíz, es más de lo mismo, sólo política, pero la gente quiere saber dónde está su fertilizante que le prometen, dónde está la semilla mejorada. Dicen que va a llegar, que hay que “empadronarse”, que hay que ir a sacar el apoyo, lo cierto es que la gente lo está haciendo, pero el apoyo cuándo va a llegar, ya hay que sembrar. De aquí a que se metan las reglas de operación de aquí a que salga premiada la persona, de aquí a que le llegue el producto, ¡hombre!, ya vamos a estar en el 2020. Se escucha por todos lados que habrá apoyos, pero ya comenzó a llover. Como dicen acá ´el temporal no va a esperar a aquellos a que se les ocurra apoyar a la gente´, esto urge ya.
-¿Cuál es el ánimo de los campesinos que se ven afectados por el bloqueo de recursos?
No, pues están bien encabronados. Están molestos, están enojados, sobre todo, porque es un apoyo que se ha venido otorgando por décadas y cada año, cada vez más campesinos organizados en Antorcha han visto una forma en que de este modo pueden ellos aprovechar la gestión de Antorcha para cultivar su tierra, pero el gobierno del estado ni una cosa ni la otra, es un malestar general, en todos los pueblos. Los campesinos que están con Antorcha son gente que no tiene tierra son personas que tienen que rentar y al no cumplir con las reglas de operación, al no presentar las escrituras de la tierra queda fuera de todo apoyo gubernamental, sea estatal o federal.
Mientras, miles de campesinos ya se preparan para salir a las calles y decirles a los mexiquenses que el gobierno estatal los ha olvidado. Preparan una marcha de 50 mil, donde acudirán con sus yuntas, con caballos, los tractores, los burros, las camionetas de redilas, etc., vamos a manifestarnos con nuestras herramientas de labranza, animales de trabajo y vamos a exigir que este acuerdo se cumpla, concluyó Juan Pedro Coahuayana.