La construcción de la refinería de Dos Bocas en Tabasco tiene a cuatro participantes invitadas por el gobierno federal para su licitación. Contar con una lista corta de empresas, que han expresado su interés, es una práctica prudente en todo sentido, explicó el director general de Burns & McDonnell, Eduardo Andrade.
El directivo consideró que puede ser considerada como una buena práctica desde el punto de vista de que es una licitación muy compleja, y existen muy pocas empresas que pueden ejecutar la refinería de principio a fin.
«Hacer una primera lista de empresas y reducirlas de cuatro a cinco, yo creo que es una práctica de compras que tiene muchas de las empresas del sector privado, no veo porque Pemex, no pueda seguir una práctica común en el mundo». consideró.
Eduardo Andrade explicó en entrevista que una empresa privada no invita a quien quiera llegar a participar con ellos, sino que invita a quien conoce, quien tiene ciertas características que le convienen y que se vuelven prudente para ser invitada.
«Una licitación tan compleja como ésta cuesta mucho dinero, tanto para el que la prepara y otro más a quien la convoca. Por lo tanto, invitar a que todos vengan, y que existan 10 participantes obliga a analizar ese mismo número de propuestas».
El director general de la empresa que ofrece servicios de ingeniería, construcción y apoyo técnico, aseguró que no tiene sentido invitar tantos participantes. «Una cosa tan compleja como ésta, si es hecha con honestidad de quien la promueve está bien».
