Tras mantener cerradas puertas de Cámara de Diputados por más de tres horas, miembros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) permitieron la salida de empleados que se encontraban dentro de las instalaciones.
«Hemos privilegiado el diálogo como instrumento para construir acuerdos. No obstante, privar de la libertad a nuestros compañeros en la Cámara lesiona el Estado de Derecho», escribió Porfirio Muñoz Ledo, presidente de la Cámara de Diputados, en su cuenta de Twitter.
«Seguiré impulsando las vías pacíficas y democráticas con el magisterio pero también denunciaré ante las autoridades competentes cualquier delito que se cometa. Tomamos las medidas necesarias que han permitido que todos los trabajadores salgan del recinto».
Esta mañana, la CNTE rechazó el dictamen aprobado en comisiones y ordenó cerrar otra vez todos los accesos a la Cámara de Diputados.
En conferencia de prensa afuera de San Lázaro, el gremio afirmó que la reforma no incluye sus demandas.
A través de altavoces, personal de resguardo empezó a desalojar al personal que salió corriendo, pero al menos 150 personas quedaron dentro del lugar.
Algunos trabajadores intentaron salir y otros que estaban afuera abogaron por su compañeros, lo que causó confrontaciones.