Pachuca, Hidalgo.- Se llevaron a cabo, durante los días que corren, diversas difusiones en todo el país, con volantes, pintas y recolección de firmas para denunciar la política de represión y cerrazón que mantiene el gobierno de Hidalgo encabezado por Omar Fayad Meneses.
Los antorchistas a nivel nacional se han sumado a diversas actividades como difusiones y cadenas humanas, en apoyo a los hidalguenses, quienes se encuentran en plantón desde el pasado 10 de abril exigiendo solución a sus peticiones de obras y servicios públicos.
Se trata de humildes campesinos y colonos de todas las regiones de Hidalgo, en lucha por recibir atención a sus legítimas peticiones ante el Gobierno del estado, en materia de obras y servicios públicos que la administración de Omar Fayad Meneses le queda debiendo al pueblo.
Un ejemplo de ello fue un grupo de colonos y campesinos que se manifestó en la Caseta de peaje de Jiménez, sobre la carretera Panamericana. También en las casetas de la carretera México-Pachuca y en diversas regiones del estado y semáforos de Pachuca.
Con pancartas y lonas, los campesinos condenaron la política represiva del gobernador, Omar Fayad que orquesta contra los antorchistas de la entidad en vista de que no sólo no atiende las demandas de los antorchistas, sino que existe una serie de ataques y amenazas desde el inicio de su administración, con la clara intención de desaparecer la organización del pueblo pobre de México en Hidalgo, y así no exista en Hidalgo una fuerza que le exija cumplimiento a su palabra y demande obras y servicios para los más necesidades del estado.
Ante las múltiples violaciones a los derechos constitucionales de los hidalguenses, se han interpuesto diversas quejas en instancias de Gobierno estatal y federal, como la CNDH, la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores, para que intervengan y se obligue al gobierno de hidalgo a resolver las necesidades urgentes de la población y de no haber solución, se inicie un proceso de juicio político a Omar Fayad para destituirlo del poder, por mantener sumida en la pobreza a sus gobernados, además de golpear y reprimir al pueblo.