En México no existen elementos de desarrollo, coordinación y experiencia en el sector académico que permitan anticipar brotes epidémicos y contribuir con el sector salud a implementar una reacción más eficiente y eficaz ante la aparición de enfermedades emergentes y reemergentes, así como para lidiar con enfermedades endémicas y con otras que parecían controladas y están repuntando, dijo la viróloga Susana López Charretón, investigadora adscrita al Instituto de Biotecnología (IBt) de la UNAM.
Ante este contexto, sugirió que “es muy importante crear un centro de virología en el país, cuyo objetivo debería ser impulsar el desarrollo de esta rama de la ciencia con base en la investigación multidisciplinaria de excelencia, la formación de recursos humanos especializados y el desarrollo tecnológico para diagnosticar, prevenir y tratar las enfermedades virales. Así mismo, coadyuvar con los esfuerzos del sistema de salud pública de México para prevenir y reaccionar con mayor eficiencia y eficacia ante emergencias sanitarias de origen viral”.
La también integrante de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) y de la Red de Virología del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), expresó que es fundamental aumentar el conocimiento de la biología de los virus; esto es, profundizar en el estudio de su estructura y organización genética, los mecanismos moleculares que utilizan para ingresar y multiplicarse dentro de una célula hospedera, o la manera como se diseminan en el organismo donde generan enfermedad.
“Este conocimiento, junto con la caracterización de la respuesta inmune del hospedero, se torna fundamental para el desarrollo de nuevas y mejores vacunas, así como el diseño racional de fármacos antivirales y de métodos de diagnósticos eficaces con mayor sensibilidad y especificidad”, sostuvo la ganadora del Premio L’Oréal-UNESCO “La Mujer en la Ciencia 2012” por su trabajo de investigación en el que identifica el modo de acción de los rotavirus.
De acuerdo con el documento publicado en 2017 “La virología en México: situación actual, retos y oportunidades”, el cual fue coordinado por otro reconocido virólogo adscrito al IBt, Carlos Arias Ortiz, “en México hay 151 investigadores y 143 estudiantes de doctorado que forman parte de 109 grupos de investigación adscritos a 37 diferentes instituciones en 21 estados del país. El estado del arte de la investigación en virología mostró que el trabajo que se hace en México es de buena calidad y competitivo a nivel internacional”.
Sin embargo, este documento también reconoce que la virología es un área que está iniciando un proceso de maduración en el país. Por ello, es necesaria la incorporación de nuevas generaciones de investigadores a nuevos centros de investigación que faciliten su interacción y aglutinen y coordinen sus esfuerzos para alcanzar una masa crítica que favorezca el desarrollo de proyectos básicos y tecnológicos más ambiciosos y de mayor impacto.
De acuerdo con Arias Ortiz, Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de Ciencias Físico-Matemáticas y Naturales (2014), “llevar a cabo investigación en virología en México no es sólo pertinente, sino que es materia de seguridad nacional, ya que las contingencias epidemiológicas causadas por las enfermedades virales emergentes y reemergentes requieren de acciones concertadas entre diferentes sectores, incluido el académico”.
Según el artículo “Grandes proyectos 2. Creación de un centro de investigación en virología”, publicado en la revista Ciencia, de la AMC, en el número dos, volumen 70, “La investigación en esta área es importante para disminuir la dependencia que tenemos de otros países en conocimiento, desarrollo tecnológico, innovación y producción de métodos diagnósticos, antivirales y vacunas”.
En dicho artículo escrito por ambos investigadores, se afirma que es muy importante considerar que la frecuencia y las manifestaciones clínicas de las enfermedades virales pueden variar debido a factores genéticos de la población, factores ambientales, infecciones previas y el estado inmunológico de las personas, entre otros. Igualmente, la gran biodiversidad de animales e insectos vectores que existe en nuestro país y en las regiones tropicales y subtropicales latinoamericanas representa ricos reservorios naturales de virus –muchos probablemente desconocidos– que pueden ocasionar epidemias no esperadas.
Por ello, es esencial caracterizar los virus y las enfermedades virales que ocurren en nuestro entorno y población particulares. El desarrollo de la virología en México, de manera coordinada entre el sector gubernamental, la academia y el sector empresarial, facilitará la innovación en este campo y contribuirá a disminuir nuestra dependencia intelectual, comercial y tecnológica del extranjero.
Los científicos concluyen que no invertir en esta área pone al país en riesgo ante emergencias sanitarias que vulneran la seguridad nacional. “Queda claro que la creación de nuevos centros de investigación especializados que incorporen y favorezcan la interacción de las nuevas generaciones de científicos es necesaria para modificar, de manera disruptiva, el progreso de esta importante área del conocimiento”.