Por: Trinidad González
Los proyectos para el presupuestos de Ingresos y Egresos de la Federación, de cara a 2020, diseñados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) basados en un pronóstico de crecimiento económico del dos por ciento, cuyo monto demasiado “optimista” está anclado al cero por ciento del primer semestre de 2019 y a la persistente caída en los ingresos tributarios del gobierno, que impedirá el financiamiento integral de los programas asistencialistas con que el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) intentará conservar su mayoría en los comicios federales y locales de 2021.
El Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF 2020)asciende a seis billones 96 mil millones 335 mil 800 pesos, cifra superior en 0.8 por ciento a la de 2019, y que ubica a México entre las 15 primeras economías del mundo, según cálculo del Fondo Monetario Internacional (FMI). Sin embargo, diversos analistas visualizan este monto como “poco realista” porque los recursos asignados a la paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex) y a la refinería de Dos Bocas –uno de los proyectos emblemáticos del sexenio– son insuficientes, igual que los destinados a la construcción de la infraestructura básica y productiva.
A pesar de lo anterior, cuando el ocho de septiembre, el Secretario de Hacienda Arturo Herrera entregó a la presidenta de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, Laura Angélica Rojas Hernández, los Criterios Generales de Política Económica y las iniciativas de Ley de Ingresos (LIF) y PEF 2020, dijo: “Creemos que es un paquete realista y queremos que así sea percibido por los inversionistas”.
En los Criterios Generales de Política Económica se prevé que al final de este año la economía nacional crecerá 0.6 y 1.2 por ciento, proyección menor al 1.1 y al 2.1 por ciento pronosticados hace nueve meses y superior al 0.1 por ciento y cero por ciento registrados en los dos primeros trimestres de 2019. Es por esta razón que los analistas consideran “optimista” el proyecto de crecimiento de entre 1.5 y 2.5 por ciento en 2020. Algunos estudios prevén incluso que será menor al uno por ciento.
Conservar el poder político
El 12 de septiembre, Edna Jaime, presidenta de la asociación civil México Evalúa, durante la presentación de un análisis del Paquete Económico 2020 y advirtió que la composición del gasto público previsto para el año entrante no servirá para impulsar el crecimiento porque la inversión del Estado disminuirá 5.4 por ciento con relación a la que se proyectó este año, lo que impactará directamente en el crecimiento del país y, por tanto, en la recaudación.
Otro de los elementos que la asociación México Evalúa cuestiona en el PEF 2020 es el incremento del cinco por ciento en el gasto de los programas que funcionan sin reglas de operación, que ascenderá a 45 por ciento, y que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador intentará gastar con propósitos políticos y electorales a partir del año próximo.
Discrecionalidad y compra de votos
“Eso nos preocupa, porque de entrada no se le exige al ejecutor del gasto que defina un compromiso de operación e impacto. Esto diluye la rendición de cuentas y eleva el riesgo de que los dineros sean usados para el control político en su formato más común, pero no único: la compra de votos”, refirió Edna Jaime tras presentar el análisis Paquete Económico 2020, de México Evalúa.
De tal forma que “en 2020, la bolsa para los subsidios sin reglas de operación asciende a 402 mil millones de pesos. Una mayor distribución del gasto hacia este tipo de programas es signo de que continuará la discrecionalidad y queda en entredicho la seriedad de la nueva política social”, consignó la agrupación en un comunicado.
“Gastar sin reglas de operación no necesariamente ayuda a los más pobres. Una cosa es gastar mucho y otra cosa es gastar bien”, añade la organización civil para destacar su crítica a la insistente política de la actual administración por destinar recursos directos o personalizados a los beneficiarios, que no necesariamente se traducen en beneficios a corto y mediano plazos.
Sin embargo, aún en este plano, el Gobierno Federal no ha cumplido a cabalidad sus programas asistencialistas. La SHCP reportó a mediados de agosto un subejercicio de 21 mil millones de pesos en la distribución de estos apoyos, incluidos los correspondientes a los más representativos de la presente administración: Jóvenes Construyendo el Futuro, Sembrando Vida y Microcréditos para el Bienestar, entre otros.
Para Edna Jaime, “un gobierno que no gasta es un gobierno que no alcanza sus metas. El Secretario de Hacienda dijo que será fundamental gastar con oportunidad, pero ¿por qué persiste este subejercicio? El propósito de la austeridad y disciplina se convirtió en la bandera de un gobierno que muchos pensaban que iba a ser muy pródigo en el gasto, pero los recortes a dependencias y la caída de la inversión pública es todo lo contrario a lo que se quería lograr de la tasa prometida, que es del cuatro por ciento”.
El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria A. C. (CIEP) en el documento titulado Implicaciones del Paquete Económico 2020, destaca que los principales recortes presupuestales afectarán a la mitad de las áreas administrativas del Gobierno Federal, entre ellas agricultura, comunicaciones y transportes, participación y atención a niños y adolescentes.
El director general del CIEP, Héctor Juan Villarreal Páez, coincidió en que “posiblemente Hacienda esté pecando de optimista” con su proyecto de que el año próximo habrá un crecimiento económico del dos por ciento. La otra variable que le preocupa es el supuesto incremento en la producción petrolera, sustentado por inversiones insuficientes.
Recortes en áreas vitales
Villarreal Páez también cuestionó que el PEF 2020 aspire a consolidar la política social del gobierno con base en asignaciones prioritarias a la Secretaría de Bienestar –como ocurre también en los sectores de energía y seguridad– pero a cambio de eliminar otros programas sociales que estaban destinados a apoyar a familias pobres con problemas de vivienda, salud, seguridad social y empleo temporal.
Una de las secretarías más castigadas fue la de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), en cuyo ámbito de operación se eliminaron los programa s Apoyo a la Vivienda, Infraestructura Urbana, Prevención de Riesgos, Provisiones para el Desarrollo y Escrituración. Lo que más han resentido las familias pobres del país es la cancelación del Programa de Apoyo a la Vivienda, con el que recibían materiales de construcción para edificar, ampliar o restaurar cuartos, pisos y techos. Ahora esos mexicanos marginados no cuentan con tal apoyo.
En 2020, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) no operará el Programa de Empleo Temporal –que daba trabajo a miles de personas en sus localidades o alrededores– ni el de Provisiones para el Rescate y Rehabilitación del Lago de Texcoco; además, el Programa de Calidad del Aire y Verificación Vehicular sufrirá una reducción presupuestal considerable.
La Secretaría de Salud (SS) eliminó el programa Prospera y cambió la denominación de las Estancias Infantiles a Programa de Bienestar para Niños y Niñas de Madres Trabajadoras. Comunicaciones y Transportes (SCT) desactivó el programa de Empleo Temporal, ya que padecerá un recorte de 18 por ciento en su presupuesto con respecto al que tuvo en 2019. Este recorte repercutirá en la construcción y mantenimiento de carreteras, puentes, caminos vecinales, etcétera.
La Secretaría de Turismo padecerá el año entrante la ausencia del Programa de Desarrollo Regional Turístico Sustentable y Pueblos Mágicos, aunque presumiblemente será compensado con el proyecto de construcción del Tren Maya. La Secretaría de Bienestar deberá enfrentar la eliminación de los programas de Comedores comunitarios, Empleo temporal y Atención a Jornaleros Agrícolas.
A la Secretaría de Educación Pública (SEP) le recortarán 37 programas; el programa asistencial Jóvenes Construyendo el Futuro –adscrito a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS)– tendrá una disminución presupuestal de 38.2 por ciento; y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) será la mayor víctima de la “austeridad republicana”. La Confederación Nacional Campesina (CNC) señaló que el “injusto” tijeretazo aplicado a esta dependencia pondrá más “a la deriva” a los campesinos.
En términos reales, el dinero destinado al agro mexicano será el más reducido en los últimos 30 años, ya que es 29.3 por ciento menor al presupuesto ejercido en 2019. La reducción presupuestal se aplicará incluso al Programa Especial Recurrente (PEC), que agrupa apoyos procedentes de todas las dependencias abocados al desarrollo del sector rural: en 2019 fue de 352 millones de pesos (mdp) y en 2020 será de 331 mdp.
El presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados, el morenista Alfonso Ramírez Cuéllar, negó a este medio que el subejercicio de 2019 se destine a completar el Presupuesto de 2020. El colmo es que, según sus cuentas, aún faltan alrededor de 150 mil mdp para completar el gasto. “Ahora necesitamos ver lo de los ingresos, de aquí al 30 de octubre”, sentenció.
Programas sin reglas de operación
Mariana Campos, coordinadora del programa de Gasto Público de México Evalúa, advirtió que uno de los obstáculos en el crecimiento económico de dos por ciento para 2020 se halla en la ausencia de la recaudación de 27 mil 668 mdp por cuenta del Gobierno Federal, y que este faltante sea compensado con los recursos disponibles del Fondo de Ingreso Presupuestario, que cuenta con 244 mil mdp. Si solo se crece 1.1 por ciento o menos, los ahorros disponibles serían insuficientes para compensar el “hueco”, por lo que se harían nuevos recortes o aumentaría el endeudamiento.
En el Paquete Económico 2020 se opta por al rescate a Pemex, actitud gubernamental que presiona a las finanzas públicas; ya que del total de la inversión física pública, 49 por ciento será para esta empresa paraestatal; es decir, de cada 100 pesos que el gobierno invierte se le destinan 50, cifra que contrasta con los tres pesos que recibe el sector salud, los dos pesos que se invierten en educación y los cuatro centavos para agua potable. Esta comparación evidencia la enorme brecha que existe en la distribución de los recursos del PEF 2020.
“Es el quinto año consecutivo que cae la inversión pública. Nos preocupa la espiral que puede ocasionar; es decir, poca inversión, menor crecimiento, menor recaudación, menor posibilidad de financiar el desarrollo. El gasto de pensiones crece a lo largo de este tiempo”, puntualizó Campos.
La especialista, entrevistada por buzos destacó también el gran riesgo socioeconómico y político que el país enfrenta con el uso a “discreción” del presupuesto público. Existen al menos dos prácticas indeseables: el subejercicio y el incremento de los programas sociales sin reglas de operación. Explicó que su organización civil criticó en su momento el Ramo 23 del sexenio anterior, pese a que sus fondos estaban destinados a atender necesidades básicas en municipios y comunidades marginadas. “Hemos criticado estos programas, que funcionan sin reglas de operación; no están regulados por ningún lado y eso se presta a la discrecionalidad”, precisó.
Alejandra Macías Sánchez, especialista en políticas públicas del CIEP, dijo que el plan económico para 2020 plantea dificultades en la identificación del gasto, porque hay una reclasificación en los ramos, los anexos y las funciones. Pero los mayores problemas, expresó, se hallan en el hecho de que existen seis rubros que carecen de sostenibilidad fiscal –derivada de la falta de recaudación– y que la inversión pública será menor a la actual, el año próximo.
Optimismo sin bases
Las calificadoras financieras coincidieron en que el Paquete Económico 2020 es muy optimista porque sobreestima la capacidad de su gobierno para captar ingresos.
Parte de la confianza que la administración federal tiene con respecto a un incremento en la recaudación fiscal se debe a la proyección de Hacienda, ya que el año próximo Pemex pasará de los mil 700 barriles diarios que actualmente extrae a los mil 866 proyectados para 2020. Esta alza en la producción llegará a los dos mil 697 barriles diarios en 2024 a un costo promedio de 46 dólares por barril, cifra menor a la presupuestada para este año (52 dólares).
El Paquete Económico 2020 está ahora en manos de los diputados, quienes deberán analizarlo y modificarlo –posibilidad remota, porque Morena es mayoría– para su aprobación final antes del 20 de octubre. Posteriormente será enviado al Senado de la República para su revisión, cuya fecha límite es el 31 de octubre; finalmente, regresará al Palacio Legislativo de San Lázaro para su aprobación final el 15 de noviembre.
Fernando Galindo, Secretario de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados opina que “se ve muy complicado que en un año se revierta lo que se ha venido disminuyendo en las últimas décadas –respecto a la producción de petróleo– y eso va a poner en riesgo los ingresos petroleros para el próximo año”.
Galindo, exsubsecretario de Hacienda en la administración federal pasada, indicó en una entrevista con WRadio que lapresente administración aplica un ajuste muy dramático que afectará a muchos mexicanos debido a su empeño por crear programas asistencialistas de marcada vocación política, en destrimento de programas sociales que funcionaban bien –como Prospera– y del apoyo financiero a las empresas pequeñas y medianas. Por esta vía –añadió– el Gobierno Federal tendrá que gastarse los ahorros que ha hecho este año o contraer deuda.