Los médicos presentan el doble de síntomas de agotamiento que todos los demás profesionales, hecho que compromete la calidad de la atención médica y pone en peligro a los pacientes. En un estudio de JAMA Internal Medicine (Medicina Interna de la Revista de la Asociación Médica Americana), los investigadores de Mayo Clinic proponen un nuevo método para combatirlo: asesoría profesional externa.
La Organización Mundial de la Salud definió al agotamiento como “una sensación de absoluta falta de energía o extenuación, un mayor distanciamiento mental del trabajo que se realiza o sentimientos de negativismo y cinismo con relación al trabajo, así como menos eficiencia profesional”. Este causa problemas tanto a los médicos como a sus pacientes. El presente estudio, dirigido por la Dra. Liselotte Dyrbye y por el Dr. Colin West, investiga el efecto de la asesoría profesional externa (enfocado en fijar metas profesionales, elecciones laborales, relaciones profesionales y cambios influyentes en el trabajo) sobre la reducción de este tipo de fatiga. Si bien los investigadores ya estudiaron el asesoramiento en otros contextos, este es el primer estudio que explora específicamente su efecto sobre el agotamiento de los médicos.
“Es fundamental ayudar a los médicos a orientar sus decisiones profesionales y a controlar el estrés en su trabajo. Muchos de estos médicos cuentan con un buen sistema de apoyo informal, pero los asesores profesionales pueden tratar una variedad de temas y carencias, además de brindar un entorno seguro donde es posible admitir las vulnerabilidades y las incertidumbres percibidas. Realmente creemos que esto permitirá a los médicos controlar sus carreras profesionales y cambiar los aspectos perjudiciales del ambiente laboral para que, en última instancia, puedan hacer bien su trabajo, sin sentirse abrumados”, afirma la Dra. Dyrbye.
Los participantes fueron 88 médicos en pleno ejercicio que empezaron el estudio con varios cuestionarios de autoevaluación que indagaban acerca del agotamiento, la calidad de vida, la resiliencia y la satisfacción laboral. Luego, tuvieron 6 sesiones con un asesor profesional debidamente acreditado y ajeno a la profesión de médico, quien trabajó con ellos en temas elegidos por los participantes. Después de las 6 sesiones, los médicos respondieron los mismos cuestionarios para documentar el progreso.
Los resultados fueron alentadores. Los médicos informaron sentir menos agotamiento y tener mayor calidad de vida después de la asesoría, comparado con la situación anterior. Cabe mencionar que los investigadores también administraron las pruebas a profesionales de la salud que no recibieron ningún asesoramiento. Durante el mismo período, la realidad fue que estos reportaron más extenuación emocional y menor calidad de vida, lo cual solo demuestra cuánto pueden empeorar estos síntomas si no se tratan.
Será importante estudiar más sobre la eficacia de la asesoría profesional combinada con otros programas, pero estos resultados plantean que se le puede añadir a la creciente lista de métodos basados en evidencia para apoyar a los médicos y, por extensión, a los pacientes a quienes prestan servicio. Aunque las asesorías son útiles, deben ofrecerse conjuntamente con otros esfuerzos organizacionales para mejorar el ambiente de la práctica médica y abordar las causas subyacentes del agotamiento entre los médicos.