Si te preocupa el cáncer de mama, quizá te hayas preguntado si hay alguna precaución que puedas tomar para prevenirlo. Si bien algunos factores de riesgo como los antecedentes familiares que no se pueden modificar, especialistas de Mayo Clinic nos comparten otros cambios que puedes implementar en tu estilo de vida.
¿Qué puedo hacer para reducir el riesgo de cáncer de mama?
Los estudios han demostrado que hacer cambios en el estilo de vida disminuye el riesgo de padecer cáncer de mama, incluso en las mujeres que tienen alto riesgo:
Restringe el consumo de alcohol. Cuanta mayor cantidad de alcohol consumas, mayor riesgo de padecer cáncer de mama tienes. Según las investigaciones acerca del efecto del alcohol, la recomendación general es de restringir el consumo a menos de 1 vaso por día porque hasta una pequeña cantidad aumenta el riesgo.
No fumes. Las evidencias crecientes plantean que existe un vínculo entre el tabaquismo y el riesgo de padecer cáncer de mama, especialmente en las mujeres premenopáusicas.
Controla el peso. El sobrepeso y la obesidad aumentan el riesgo de padecer cáncer de mama y más todavía cuando ocurren a mayor edad, particularmente después de la menopausia.
Haz actividad física. Además de ayudarte a mantener en un peso saludable, lo que, a su vez, ayuda a prevenir la enfermedad.
Amamanta a tu hijo. La lactancia podría desempeñar un importante rol en la prevención de este tipo de cáncer. Cuanto más tiempo amamantes, mayor será el efecto protector.
Limita la dosis y la duración de la terapia hormonal. La administración de la terapia hormonal combinada durante más de tres o cinco años aumenta el riesgo de padecer cáncer de mama. Si la recibes para tratar los síntomas de la menopausia, consulta a tu médico para evaluar si hay otras opciones, porque quizás puedas controlar los síntomas con medicamentos y terapias no hormonales. Si decides que los beneficios de la terapia hormonal a corto plazo superan los riesgos, usa la dosis más baja que sea eficaz para ti y deja que el médico supervise el tiempo que tomas las hormonas.
Evita exponerte a la radiación y a la contaminación ambiental. Los métodos de diagnóstico por imágenes, como la tomografía computarizada, utilizan altas dosis de radiación. Si bien es preciso estudiar más este asunto, algunas investigaciones dicen que existe un vínculo entre el cáncer de mama y la exposición a la radiación. Por lo tanto, solo hazte esos estudios cuando sea absolutamente necesario.
¿Puede una dieta saludable prevenir el cáncer de mama?
Una dieta saludable podría disminuir el riesgo de algunos tipos de cáncer, además del riesgo de diabetes, enfermedades del corazón y accidente cerebrovascular. Por ejemplo, el riesgo para cáncer de mama podría ser menor en las mujeres que siguen una dieta mediterránea complementada con aceite de oliva extra virgen y frutos secos variados. Esta se centra principalmente en alimentos de origen vegetal, como frutas y verduras, cereales integrales, legumbres y frutos secos. Las personas que siguen la dieta mediterránea eligen grasas saludables, como aceite de oliva en lugar de la mantequilla y pescado en lugar de carne roja.
¿Existe una conexión entre las píldoras anticonceptivas y el cáncer de mama?
Existe alguna evidencia respecto a que el riesgo de cáncer de mama aumenta con la anticoncepción hormonal, incluido las píldoras anticonceptivas y los dispositivos intrauterinos (DIU) que liberan hormonas. Sin embargo, dicho riesgo se considera muy pequeño y disminuye una vez suspendidos los anticonceptivos hormonales.
Por lo tanto, analiza con tu ginecólogo las opciones de anticonceptivos en función de tus necesidades particulares.
¿Qué más puedo hacer?
Mantente al día en la detección del cáncer de mama. Si observas algún cambio en tus senos, como la aparición de un bulto o cambios en la piel, acude a consulta con el médico. Asimismo, acércate a un especialista cuando, según tus antecedentes personales, deberías comenzar a hacerte mamografías y otros exámenes de detección.