ESTÉNTOR POLÍTICO
Miguel Ángel Casique Olivos
Con un año y tres meses de gobierno en la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum ya puede ser evaluada por los más de nueve millones de mexicanos que habitan la gran Metrópoli y la percepción es que sólo el 45 por ciento de los mexicanos aprueba su gestión, es decir, 4 de cada 10 capitalinos sienten que la mandataria capitalina está realizando “un buen gobierno”.
En una encuesta del diario nacional Reforma, que tomó como muestra a 800 capitalinos entre el 20 y el 25 de febrero, destaca que la violencia y la inseguridad contra las mujeres fueron, mayoritariamente, las causantes de que la calificación que los ciudadanos le dan a la Jefa de Gobierno sea de 4.5; una calificación a todas luces reprobatoria, incluso, al compararla con los dos últimos meses, sufrió una caída de 5 puntos.
Si hacemos una comparación en las caídas de aprobación entre el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y la Jefa de Gobierno, se observará que la baja es más rápida para la funcionaria capitalina pues mientras López Obrador baja en promedio entre 1.5 y 2 puntos por mes, Claudia Sheinbaum desciende 2.5 puntos.
La violencia contra las mujeres y las últimas protestas contra el feminicidio, tras el asesinato de la niña Fátima, han hecho que la percepción de violencia aumente a 11 puntos; por ejemplo el 81 por ciento de los citadinos manifiestan que este problema aumentó contra el 6 por ciento que dice, disminuyó; por otro lado, el 72 por ciento asegura que el gobierno de la morenista Claudia Sheinbaum no ha hecho lo suficiente para combatir este problema.
Otros rubros donde la encuesta presenta un fracaso son: en el mejoramiento de movilidad el 42 por ciento; en el abastecimiento de agua el 49 por ciento; en ataque a la corrupción el 51 por ciento; en mejorar la seguridad el 60 por ciento; combatir la violencia contra mujeres 59 por ciento y el 62 por ciento en combatir al narcotráfico; en general, pues, la Jefa de gobierno fracasa en todo.
Atención especial merece la tarea que tiene de lidiar con las marchas y protestas, el 63 por ciento dice que ha fracasado, es decir, que 6 de cada 10 capitalinos la ven como una mala operadora para tomar en cuenta a los diferentes sectores sociales que protestan y que denuncian o solicitan atención de alguna problemática social. También el 60 por ciento de los habitantes asegura que la economía familiar ha empeorado en el último año, 12 puntos más que hace dos meses.
Un claro ejemplo de la nula atención de protestas e inconformidades se ve con miles de mexicanos organizados en el Movimiento Antorchista de la Ciudad de México, que han estado solicitando, desde que empezó el gobierno de Sheinbaum, que se atiendan demandas sociales como apoyos a la vivienda, introducción de servicios de agua potable, luz eléctrica, drenaje y apoyos a la educación; sin embargo, los meses, la semanas y los días pasan y la política de oídos sordos sigue y Claudia Sheinbaum continúa la política federal: no trata con organizaciones sociales y menos atender peticiones de elemental necesidad.
El Gobierno de la República que encabeza López Obrador, la pésima emulación de Miguel Barbosa en Puebla que no respeta la ley y la democracia, y la indiferencia y lentitud para gobernar de Claudia Sheinbaum, van formando un cuadro nacional para que los mexicanos se den cuenta que Morena no sabe gobernar y, además, que sigue la crisis política, económica y social en México.
Clímax no político…
Todo parece indicar que la entidad poblana, gobernado por Miguel Barbosa también de extracción morenista se está convirtiendo en la casa de los muertos. Tan solo en el mes de enero del año en curso, ocurrieron 17 asesinatos en dos días y un total de 116 homicidios durante todo el mes. Hay una crisis de violencia y las autoridades se muestran incapaces de atiende el tema de inseguridad que lastima a varios sectores de la capital poblana.
Por otro lado, el número de víctimas de Coronavirus aumenta cada día. En México todo parece estar tranquilo y las autoridades de la salud no se muestran preocupadas, pero “se hacen ensayos” ya y se dicen estar preparados para enfrentar lo que hoy pone estupefacto a la población mundial. Por el momento, querido lector, es todo.