Los obreros y trabajadores de la construcción serán evaluados para detectar síntomas antes de comenzar la jornada laboral para prevenir contagios de coronavirus (COVID-19), determinó el Gobierno de la Ciudad de México.
Jesús Esteva Medina, titular de la Secretaría de Obras, anunció que obras públicas y privadas deberán acatar las medidas con el propósito de que puedan continuar durante la contingencia.
“Buscamos en la medida de lo posible no suspender las obras que generan tantos empleos directos”, dijo el funcionario.
En cada obra deberá designarse a un responsable de implementar las medidas de higiene durante la contingencia por COVID-19, entre las que se encuentran:
- Garantizar suministro de agua, jabón, gel antibacterial, cubrebocas y termómetros.
- Tomar la temperatura con termómetro digital a todo el personal de la obra.
- Impedir el acceso a quien presente fiebre mayor a 38 grados o síntomas como dolor de cabeza, tos, dificultad para respirar o dolor de articulaciones.
- Evitar concentraciones de más de 10 personas en espacios cerrados.
- Mantener una distancia de 1.5 metros entre los trabajadores.
- Limpieza y sanitización de equipos herramientas y espacios de trabajo.
- En caso de detectar a alguien con síntomas, enviar un mensaje de texto con la palabra “covid19” al 51515 o llamar a Locatel al 565811.
Esteva agregó que el personal de obra con 65 años o más deberá ser enviado a su hogar y garantizar su salario. Además se deberá evitar en lo posible los campamentos de obra y de ser indispensable cuidar la distancia de 1.5 metros entre los obreros.
Por el momento las obras públicas y privadas podrán continuar, sin embargo no se descarta que de avanzar la epidemia puedan ser suspendidas, señaló el Secretario de Obras.