ESTÉNTOR POLÍTICO (EXPRÉS)
Miguel Ángel Casique Olivos
|Como si no fueran suficientes las pruebas que muestran la falta de oficio político de los gobernantes morenistas; en Puebla el propio gobernador Miguel Barbosa, desata un nuevo conflicto en medio de la contingencia sanitaria por el Covid-19, -horas antes de haber sugerido a los contagiados, comer «caldo de pollo y chile bien picoso» para no volver a enfermar-, el Tribunal Electoral del Estado de Puebla (TEEP), sometido completamente, bajo las órdenes del propio gobernador y a puerta cerrada, declaró que no procede el otorgar el registro como partido político al Movimiento Antorchista Poblano local (MAP), luego de que éste interpusiera 96 apelaciones.
¿Por qué Barbosa y el TEEP hacen esta maniobra política en medio de la contingencia?, ¿tiene algún miedo el Tribunal de hacerlo después, cuando miles de poblanos puedan protestar? La respuesta, y no cabe ninguna duda, es afirmativa; pero, además, se estaría violando a la luz pública, el derecho que tiene cerca de medio millón de poblanos a organizarse y formar un partido político.
El morenista Barbosa ha estado en el ojo del huracán y sin cumplir un año de gobierno ya se ha metido en muchos problemas; por ejemplo, en la entidad se orquestó una protesta estudiantil para exigir justicia a estudiantes asesinados; y aunque el mandatario estatal lo ha negado, está emprendido una campaña de desprestigio contra la edil poblana Claudia Rivera, lo cierto es que él quiere atacarla y someterla mediante la imposición de personal de seguridad en el municipio y su administración.
Luis Miguel Barbosa, en al menos dos encuestas recientes, ha sido señalado como el peor gobernador evaluado y muchos políticos de la entidad comentan que el morenista es incapaz políticamente, de gobernar un estado donde la pobreza, la inseguridad y el huachicol siguen haciendo de las suyas; los estudiantes con su mega marcha de 150 mil exigieron su renuncia como gobernador, las voces a esta petición se suman día a día.
El Tribunal Electoral Estatal hace lo que su jefe político le ordena y con eso viola la Carta Magna y el derecho que tienen miles de poblanos, de organizarse y unirse con fines lícitos. Barbosa, por lo visto, tiene miedo de que le arrebaten rápidamente el poder político y por eso prefiere salir al paso prohibiendo al único grupo que en Puebla solicitó registro como partido político y, además, que tiene altísimas posibilidades de ganar, por la vía electoral, la gubernatura en las próximas elecciones; porque Morena y Barbosa no saben gobernar y en pocos meses de administración están llevando a Puebla a un conflicto social muy grande en el que el gobernador y la 4T se hunden más en su abismo de torpeza.
La dirigencia del MAP seguirá con certeza sus acciones legales y seguramente llevará el asunto al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Pero más allá de esto, Barbosa debe saber que al MAP se han sumado miles y miles de poblanos, y la inconformidad contra su gobierno está creciendo. Los 300 mil poblanos, con MAP o sin MAP, van a seguir su camino y pondrán a Puebla de pie; le guste o no a Barbosa y a Morena, Puebla necesita seguridad, vivienda, educación, salud y apoyos para el campo. Ese río humano que suena muy fuerte con la voz de 300 mil mexicanos ya no lo detienen nadie.
Clímax no político…
Y… ¿qué dirá el gobierno de Alejandro Murat ante la arbitraria acción policiaca del presidente municipal de San Pedro Ixtlahuaca?, quien este 31 de marzo envió a un grupo de policías para amenazar y detener el trabajo que hacía una decena colonos en su propiedad.
Con lujo de violencia, la policía municipal de Manuel Duarte Pérez, impidió que se realizaran los trabajos de limpieza y acondicionamiento de un terreno para la construcción de un parque deportivo y cultural en la zona, proyecto social impulsado por colonos afiliados al Movimiento Antorchista Oaxaqueño.
A raíz de que el alcalde -que ganó como candidato independiente-, cancelara sin justificación alguna las actividades que se tenían planeadas para aplanar un terreno ubicado en el paraje «El Llano», pobladores habían estado trabajando en la limpieza del espacio, cuando este martes arribó la policía, encabezados por el síndico municipal, Luis Guadalupe García Ramos, y con lujo de violencia y amenazas de golpes y arresto a los presentes, les arrebató la máquina con que se realizaban los trabajos.
Pero para más sorpresa de los colonos, en el grupo de la policía municipal también iba un grupo de cholos y porros para agredir a la ciudadanía. ¿Qué presidente municipal es este que se opone al desarrollo de los pueblos y quiere evitar la construcción de un parque deportivo y cultural en la zona? Solo uno que posiblemente tiene la autorización para actuar del mismísimo gobierno estatal. La verdad se sabrá muy pronto. Por el momento, querido lector, es todo.