El Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) cuenta con 2 mil 343 ventiladores médicos en 28 estados de la república, pero el reporte detallado de las condiciones en que se encuentra cada uno de ellos revela que 58 por ciento del total sencillamente no funcionan. Hay mil 364 que no servirán para enfrentar la alta demanda de aparatos para respiración mecánicamente asistida que ya está generando la pandemia de COVID-19.
Latinus obtuvo un listado interno del Insabi, del gobierno federal de México, en el que se incluyen los ventiladores médicos existentes en 28 entidades. No están incluidos Aguascalientes, Zacatecas, Guanajuato ni la Ciudad de México.
El detalle de lo que los estados le reportaron al instituto incluye desde aparatos obsoletos, dañados, descompuestos, hasta incompletos, inservibles e irreparables. Pantallas que no funcionan, ventiladores sin válvulas, otros descontinuados, con batería irreparables y otros rubros. Hay también los que se consigna que necesitan mantenimiento correctivo, que tendría que incluir reparaciones, y otros que requieren mantenimiento “preventivo” pero que les faltan piezas, conexiones o baterías.
Un oficio del Insabi fechado el 8 de abril, apenas el jueves pasado, más de 3 meses después de que comenzó la pandemia y cuando México ya se encontraba en la Fase 2 decretada por las autoridades sanitarias, informa a las “secretarias y secretarios de Salud de las entidades federativas”, que al día siguiente se iniciaría “el servicio de mantenimiento preventivo y correctivo de ventiladores para la atención del COVID-19”.
Firmado por el director general del instituto, Juan Antonio Ferrer Aguilar, el oficio menciona a cuatro proveedores privados que realizarían ese mantenimiento: Servicios de Ingeniería en Medicina, Dräger Medical México, Kendall de México y la firma Instrumedical.
Latinus pudo confirmar que por lo menos uno de ellos declinó la petición del Insabi por la premura, ya que el mantenimiento correctivo no puede realizarse a tiempo para que los aparatos sean usados en esta pandemia en curso ni hay disponibles en el país las refacciones requeridas para la reparación.
Un vocero de la secretaría de Salud del gobierno de Guanajuato dijo que el Insabi no los contactó para saber el estado de los ventiladores existentes en el sistema local de salud y tampoco ha ofrecido ningún tipo de ayuda para enfrentar la pandemia por COVID-19. Agregó que el estado compró por su cuenta 92 aparatos nuevos, que tuvieron un costo de 40.8 millones de pesos. En total, dijo, el sistema de salud pública de la entidad tiene 890 ventiladores.
En el reporte de Baja California se hace un apartado para Tijuana, en el que se consigna la existencia de 12 ventiladores en buen estado. La Secretaría de Salud estatal alertó que para esta semana ya serán insuficientes los aparatos de ventilación en Tijuana y en todo el estado por el incremento de casos de COVID-19 de las últimas dos semanas. Latinus reveló el 11 de abril la situación de crisis que se vive en los dos hospitales del IMSS. El Hospital General, independiente del IMSS, está dedicado ya en su totalidad a atención por COVID-19.
El Estado de México, según el inventario del Insabi, reporta 233 ventiladores. Todos necesitan mantenimiento correctivo o preventivo, o necesitan reparaciones, piezas e insumos para su operación. Tabasco reporta 102 aparatos y establece que todos ellos requieren mantenimiento. Hidalgo informa que tiene 64 ventiladores, de los cuales 29 son obsoletos y el resto no funciona o requiere reparaciones. Tamaulipas enlista 63, de los cuales 13 están fuera de servicio y el resto requiere reparaciones o mantenimiento correctivo.
El 26 de marzo pasado, el Insabi solicitó a la Secretaría de Hacienda 140 millones de pesos adicionales a su presupuesto para la compra de equipo necesario para la atención a enfermos graves de COVID-19, entro los que precisó se buscaría comprar 150 ventiladores adulto-pediátricos. Los fondos le fueron autorizados.
Este listado es exclusivamente del Insabi en 28 entidades. El Instituto Mexicano del Seguro Social envió apenas el 18 de marzo un oficio, del que Latinus tiene copia, a sus hospitales y clínicas en todo el país solicitándoles hacer un inventario de equipo necesario para atender a pacientes con casos graves de COVID-19, incluidos ventiladores para respiración asistida. El gobierno de Andrés Manuel López Obrador anunció la semana pasada la compra de 2 mil 500 ventiladores a China y afirmó que para la fase 3 de la pandemia tendrá cerca de 10 mil ventiladores disponibles, según informó el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell.
Según el estimado de los epidemiólogos en el mundo, entre 40 y 70 por ciento de la población se contagiará de COVID-19 y cerca de 10 por ciento desarrollará un caso grave de la enfermedad. La secretaría de Salud ha ofrecido un cálculo similar para el caso de México.
De los 2 mil 343 ventiladores reportados al Insabi, habrá que restar mil 364.
Con información de Latinus