Los arrestos de las autoridades de Estados Unidos en la frontera con México disminuyeron drásticamente en abril, ya que los inmigrantes fueron deportados rápidamente bajo nuevas reglas destinadas a limitar la propagación del coronavirus, dijo el jueves un funcionario de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
La Patrulla Fronteriza arrestó a unas 16 mil personas en abril, una baja del 47% respecto al mes anterior.
De acuerdo con autoridades, esto se debe a la decisión del gobierno de expulsar a los migrantes en virtud de un estatuto centrado en la salud que entró en vigencia en marzo, así como a las restricciones a los viajes establecidas por otros países.
El estatuto permite a los agentes deportar a los migrantes detenidos en la frontera. Esto incluye los solicitantes de asilo y los niños no acompañados, sin procesos legales estándar.
“Eso realmente ha llevado a la reducción en los números generales”, dijo Mark Morgan, comisionado de CBP.
Destacó además que la mayoría de las personas capturadas en abril eran adultos solteros llegados desde México, que pueden regresar rápidamente a su país.
Las estadísticas subrayan cómo el presidente Donald Trump ha impulsado su campaña contra la inmigración durante la crisis del coronavirus.
El republicano, quien buscará la reelección en noviembre, ha hecho de la inmigración un tema central de su mandato y la campaña 2020.
En marzo, Estados Unidos cerró temporalmente sus fronteras con México y Canadá para los viajes no esenciales y pausó los servicios de visa de rutina en la mayoría de los países del mundo.
Con información de Reuters