Con la atención concentrada en la Ciudad de México y los 59 municipios conurbados del Estado de México, en Cancún, Quintana Roo, en Culiacán, Sinaloa, en Villahermosa, Tabasco, y en Tijuana, Baja California, el colapso hospitalario por la saturación de pacientes con COVID-19 ya es una realidad en al menos siete municipios medianos.
En medio del pico más alto, los contagios por coronavirus han alcanzado picos alarmantes en alcaldías como Lázaro Cárdenas, Michoacán; Coatzacoalcos, Veracruz, Ahome, Sinaloa, y Matamoros, Tamaulipas, que reportan entre 128 y 217 casos positivos.
Otros municipios reportan, de acuerdo con el mapa oficial de la Secretaría de Salud, la expansión de los contagios de entre 42 y 88 casos confirmados de COVID-19, como Ensenada, Baja California, Guasave, Sinaloa, y Tecate, Baja California.
Lo que alarma a las autoridades municipales y estatales en esas regiones es la endeble capacidad hospitalaria para atender enfermedades generales, pacientes contagiados con COVID-19 y, sobre todo, personas que requieren camas con ventilador en estado crítico por el coronavirus.
Es el caso del puerto de Lázaro Cárdenas, Michoacán, que este fin de semana llegó a 217 contagios, y donde la alcaldesa, Itzé Camacho, reveló que el ayuntamiento sólo cuenta con 70 respiradores artificiales.