Se repite la campaña mediática con que han iniciado las agresiones de grupos de poder de San Juan Mixtepec en contra de Santo Domingo Yosoñama.
- Al gobernador del Estado de Oaxaca, Mtro. Alejandro Murat Hinojosa.
- Al Secretario de Gobierno Héctor Anuar Mafud Mafud.
- Al Fiscal Estatal Dr. Rubén Vasconcelos Méndez.
- A la opinión pública.
La historia de los crímenes de los grupos de poder de Mixtepec contra Yosoñama, demuestra que estos iniciaron con campañas de desprestigio en los medios de información. La abrupta interrupción de la mesa de trabajo en que las respectivas autoridades agrarias manifestaron su interés en poner fin a este conflicto que lleva ya varias décadas, es la prueba de que se trata en el fondo, de una agresiva operación política que extiende sus ramales mucho más allá de esa zona de la Mixteca, operación de la cual las autoridades municipales de Mixtepec son solo el rostro visible.
El Comité Estatal del Movimiento Antorchista en Oaxaca rechaza categóricamente las calumnias y solicita la urgente intervención del gobernador del estado, ante la inminente agresión que se anuncia en declaraciones irresponsables del presidente municipal de San Juan Mixtepec, en contra de habitantes de Santo Domingo Yosoñama; el último, realizado el día de ayer, 18 de junio de los corrientes, a continuación, enlistamos los hechos en que sustentamos esta aseveración:
- En una nota publicada el 4 de abril en el medio digital www.nvinoticias.com, el presidente municipal, Pablo Santiago Bautista, aseguró que un grupo armado agredió a la agencia de policía Pueblo Viejo perteneciente a Mixtepec, desde los límites entre las dos comunidades.
- El 1 de junio, en elpregondeoaxaca.wordpress.com, se publicó otra declaración de Santiago Bautista, en que acusa a pobladores de Yosoñama de disparar a personas de Pueblo Viejo, y que, de la misma forma, sin permiso, realizaron la apertura de un camino a escasos metros de la mencionada localidad. Declarando que el destacamento policial atestiguó los hechos, pero no actuó porque no le dieron órdenes de hacerlo.
- Ayer por la mañana, en varios medios digitales, el comisariado de Bienes Comunales, el presidente y síndico municipales, denunciaron que vieron a gente extraña portando armas largas y arrastrando a Erick López Santiago de 30 años, en la comunidad de Pueblo Viejo, partiendo con rumbo a Yosoñama. Acto seguido pidieron justicia por los supuestos ataques que han sufrido a manos de habitantes de Yosoñama. Y después de exigir que las autoridades dejen la simulación, solicitan que cese la “impunidad de que gozan los asesinos de Antorcha” y se actúe contra nosotros.
A cada una de estas acusaciones hemos respondido puntualmente, demostrando su falsedad, exigiendo pruebas a nuestros detractores y, sobre todo, pidiendo la intervención de la SEGEGO para mantener el ambiente de paz en la zona. Afirmamos, además, que estas declaraciones son el preludio de un ataque inminente en contra de nuestra Organización, porque ese escándalo mediático con que buscan desprestigiarnos se ha hecho cada ocasión para medir la respuesta de los afectados y, sobre todo, generar un ambiente de aversión contra los antorchistas en la opinión pública.
De igual manera, denunciamos que a partir del 11 de junio, habitantes de San Juan Mixtepec han disparado en varias ocasiones, ellos sí, hacia las tierras de Yosoñama, por lo que pedimos la inmediata intervención de las autoridades para que se comprobara la veracidad de nuestras declaraciones y se tomaran las medidas pertinentes, dentro de ellas, que se turnara a la fiscalía del estado la información necesaria para su intervención, por ser hechos en los que estaba implicado el uso de armas de fuego. Nuestras peticiones han sido ignoradas.
Las autoridades estatales y la opinión pública en Oaxaca saben de sobra que quienes han cometido crímenes atroces, aprovechándose de su influencia política y comprando la ley para usarla a su favor, con toda la impunidad que pueda uno imaginarse, son los grupos de poder de San Juan Mixtepec, sin que se haya castigado a los responsables de decenas de asesinatos y actos criminales, como por ejemplo: el secuestro de 39 comuneros de Buenavista por más de 72 días, el asesinato del dirigente antorchista Miguel Cruz José el 24 de diciembre de 2010, el asesinato a tiros y posterior incendio de once personas el 14 de diciembre del 2013 en el paraje Tres Cruces, todos ellos, parte de una lista interminable de atentados que se remontan hasta el 30 de abril del 2018. De todos estos crímenes se presentaron en tiempo y forma las denuncias correspondientes y fueron abiertos los expedientes respectivos, sin que hasta la fecha haya algún detenido. Es decir, las autoridades políticas y de impartición de justicia del estado tienen pleno conocimiento de los hechos.
Y no solo no se ha hecho justicia, sino que a los calumniadores se suma la complicidad de algunas dependencias, como lo demuestra el hecho de que ayer por la tarde la Vice fiscalía Regional de la Mixteca, sin los debidos procedimientos, envió un requerimiento al C. Marcos José González, agente de Yosoñama, para que “pusiera a disposición de la Fiscalía al C. Eric López Santiago, y en caso de omisión, sería responsable de los delitos que le causaren en agravio”.
Por lo tanto, solicitamos que el gobernador del estado, Mtro. Alejandro Murat Hinojosa, nos atienda de inmediato y, sobre todo, garantice que la Fiscalía del Estado esclarezca los hechos, encuentre a los culpables de este acto y exima de responsabilidades a los habitantes de Yosoñama, quienes son víctimas no solo de las calumnias y ataques de sus verdugos, sino de una institución que debe impartir justicia y que contradice sus funciones, cuya complicidad es una flagrante violación a los derechos humanos del imputado, puesto que se da por válida la acusación sin pruebas y sin el debido proceso. Advertimos, además, de la peligrosidad de elevar a categoría de verdad y por tanto de pruebas en materia jurídica, las declaraciones de cualquier sujeto ante los medios de información; a la vez, responsabilizamos directamente a las autoridades involucradas de los crímenes que puedan cometerse en agravio de estos ciudadanos indefensos y en claro menoscabo de nuestro endeble sistema de impartición de justicia.