La tuberculosis, la polio o la hepatitis son vacunas que han pasado a un segundo plano en muchos países de América Latina debido a la crisis sanitaria desencadenada por el covid-19.
También la rubeola, la fiebre amarilla, la poliomielitis o el sarampión.
Los datos recopilados por la OMS, UNICEF, Gavi y el Instituto de Vacunas Sabin en un informe mostraron que las medidas de cuarentena obstaculizaron la inmunización en al menos 68 países.
Según estas organizaciones internacionales, esto aumentó el riesgo de que aproximadamente 80 millones de niños menores de 1 año contraigan una enfermedad prevenible, pero que en muchos casos puede resultar grave.
Con los recursos sanitarios de muchos países volcados en luchar contra los estragos que deja el coronavirus a su paso, el número de muertes totalmente prevenibles gracias a una vacuna ha repuntado.