De enero a julio, México perdió 925 mil 490 empleos formales, de los cuales el 71.5% eran puestos permanentes, informó este miércoles el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
La pérdida de empleos representa un 4.5% menos puestos de trabajo de los que se tenían al cierre de 2019. Tan solo en julio, el IMSS reportó 3,907 puestos de trabajo menos que en junio.
Quintana Roo, Baja California Sur y Guerrero, estados que dependen del turismo, son las tres entidades más afectadas por la destrucción de empleos formales; solo Tabasco y Baja California tuvieron un incremento en el empleo.
Los sectores que tuvieron la mayor pérdida de empleo son el de la construcción con una caída de 11%, servicio para empresas cayó 8.8% mientras que el sector de la extracción recortó sus empleos en 7.5%.
La manufactura y el comercio tuvieron una pérdida de 4.2 y 2.3%, mientras que los empleos en transportes y comunicaciones perdieron 1.1% de sus puestos.
Por entidad federativa, Quintana Roo, Baja California Sur y Guerrero son las tres entidades más afectadas por la destrucción de empleos formales; sólo Tabasco y Baja California tuvieron un incremento en el empleo.