Conforme pasan los meses y la pandemia, los ingresos en los hogares mexicanos se reducen y más del 70% de la población reportan dificultades para abastecerse de productos básicos o comida, de acuerdo a un estudio de la Universiverdad Iberoamericana.
63% de los hogares declaran que han visto reducidos sus ingresos desde el inicio de la cuarentena. La reducción promedio reportado en el estudio universitario fue de 47.7% en junio y el 48.5% en julio.
Los resultados corresponden a junio y julio 2020 en la Encuesta de Seguimiento de los Efectos del COVID-19 en el Bienestar de los Hogares Mexicanos (ENCOVID-19) realizada por la Universidad Iberoamericana, A.C., a través del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo con Equidad (EQUIDE).
1 de cada 3 hogares declaró una reducción de 50% o más en sus ingresos: 31.5% en junio y 30.5% en julio, agrega
Pero el escenario también se ha complicado en el tema de la alimentación pues en junio, el 69.2% de los hogares reportaron tener preocupaciones o dificultades para acceder a alimentos, aunque para julio este porcentaje ya se había incrementado a 72.8 %, según esa misma encuesta.
En junio el 30.8% de los hogares reportaron no tener preocupaciones para acceder a alimentos, sin embargo, tan solo un mes después, en julio, ya solo era el 27.2%. de hogares los que no tenían dificultades alimentarias, es decir, cada vez son menos los que no tienen dificultades para acceder a alimentos.
Dicho sondeo también arroja que la mayor recuperación de empleos se ha registrado en la informalidad, donde la desocupación en ese rubro se redujo casi 10 puntos porcentuales de mayo pasado a julio, lo que significa que 9 de cada 10 trabajadores informales han regresado a sus actividades en estas semanas con la reapertura económica.
La tasa de desocupación en el sector formal también disminuyó, lo que significa que, si bien millones de trabajadores perdieron su empleo, otros miles si lograron regresar a sus fuentes de empleo.
De hecho, el porcentaje de hogares que reporta recibir una o más ayudas de gobierno o programas sociales aumentó de 27.2% en junio, a 39.4% en julio, aunque es necesario investigar más sobre la calidad y frecuencia de estas ayudas, apunta el sondeo.