- La cuarta transformación no es hija de una revolución del pueblo como ocurrió con el movimiento de Independencia.
- Se recrudece y amplía la persecución política contra los opositores.
Ciudad de México.- Al cumplirse el 210 aniversario del movimiento de Independencia, el líder nacional del Movimiento Antorchista Nacional, Aquiles Córdova Morán, señaló que el gobierno de Morena no representa la continuación de las transformaciones políticas de los siglos XIX y principios del siglo XX, ya que su alternativa política no surgió de una revolución armada y actualmente encabeza una política antipopular contra el propio pueblo, al que reprime por defender sus derechos, tal como ocurre con el Antorchismo y recientemente el movimiento de agricultores en Chihuahua.
Al cuestionar si la Cuarta Transformación es hija legítima y continuadora de las gestas del pueblo mexicano, Córdova Morán concluyó que en el gobierno del presidente, Andrés Manuel López Obrador, “lo que estamos mirando es el hijo bastardo que hace un mal uso del pasado mexicano para justificar su política antipopular, que lejos de ser un salto hacia delante es un salto hacia atrás, es un retroceso; y lo peor es que quienes estamos pagando más este retroceso es el pueblo y, en particular, el pueblo organizado, y si no, ahí está Chihuahua y Antorcha para demostrarlo.”
Al hacer un análisis histórico sobre los movimientos políticos que constituyeron las tres transformaciones sociales previas, el líder social afirmó que las revoluciones siempre son hechas por los pueblos, acompañados de ideólogos y caudillos, quienes tienen una concepción profunda sobre las problemáticas y proponen soluciones, por lo que encarnan el proyecto de nueva sociedad, es decir, las verdaderas revoluciones las hace el pueblo, que aporta su fuerza material y decisión de batalla. Aunque el pueblo ha participado, sus intereses siempre han quedado relegados, como ocurrió en el movimiento encabezado por Miguel Hidalgo y José María Morelos.
“Conseguimos la independencia de España pero fue puramente política, dejamos de ser una colonia española y nos convertimos en una nación teóricamente soberana e independiente, pero los pobres, los peones, los siervos, los que vivían sometidos a los grandes hacendados y los que vivían sometidos al poder de los españoles ricos, siguieron en la misma situación” dijo al analizar la gesta de Independencia. Precisó que tanto en la Reforma, la Independencia y la Revolución mexicana, no hubo una revolución social que alcanzara a las clases pobres, las clases pobres siguieron siendo lo mismo.
Afirmó que el pueblo ha tardado siglos para adquirir conciencia sobre su propio proyecto de país, para defenderlo, con sus propios líderes y luchar para alcanzarlo, un hecho que en el mundo, se logró a finales del siglo XIX, cuando el materialismo histórico brindó un arma a las clases populares para la defensa de su bienestar, sus derechos y el reconocimiento pleno de las clases trabajadoras dentro de una sociedad equilibrada en el terreno político, social, económico y cultural.
Ejemplificó que en la Revolución Mexicana los campesinos, los trabajadores, los obreros, volvieron a quedar como una clase sometida, por lo que sí hace falta una cuarta transformación, “un cambio en el que el pueblo participe con su propio proyecto de país, con su propia visión de lo que hay que hacer para que se beneficie el pueblo y todas las demás clases que quieran sumarse a la lucha del pueblo y que estén dispuestos a reconocer en el pueblo al verdadero creador de la riqueza social” dijo sobre la necesidad auténtica de otro movimiento revolucionario, ahora que el pueblo de México y del mundo sabe cuál es su papel.
El gobierno de Morena no representa la continuación de los grandes movimientos porque tampoco ha podido explicar las características de ese país que propone, y, por lo tanto, el pueblo mexicano no puede defenderlo; alertó que, lejos de clarificar la supuesta transformación, se empeñan en esconder la realidad, aspecto que debe preocupar a todos los mexicanos, por lo que llamó a juzgar ese proyecto de país por los resultados en el gobierno de López Obrador.
Denunció que a la parálisis educativa, la aguda crisis económica, la nula inversión en los sectores populares como se observa en el PEF 2021, el pueblo también enfrenta represión política en el gobierno de Morena, a través del uso de instituciones como la Unidad de Inteligencia Financiera, instancia que persigue a los opositores de la 4T, entre ellos el Antorchismo nacional y recientemente el movimiento de productores de la presa La Boquilla, en Chihuahua.
“Sostenemos que estamos siendo víctimas de una represión política, Santiago Nieto está utilizando la facultad que tiene para congelar cuentas de los ciudadanos acusados o sospechosos de manejar recursos de procedencia ilícita, lo está usando como un garrote para reprimir a los opositores del régimen” dijo sobre la campaña de la UIF para desprestigiarlos como luchadores sociales acusándolos de corrupción, sin que medie proceso judicial alguno.
Llamó a opinadores y exponentes de la opinión pública a reconocer que la represión política contra agricultores en Chihuahua también se da contra el antorchismo. “No quieren reconocer ahora que Antorcha es la única organización que tiene masas, estructura, valor y decisión para salir a defender la verdad ante el gobierno de López Obrador”, dijo al invitar a líderes de opinión a que dejen a un lado los prejuicios resultado de 46 años de una campaña de mentiras contra este movimiento, para reconocer que la amenaza ahora es contra todos los opositores.
“Lo que hicieron con los agricultores de Chihuahua exhibe de cuerpo entero la arbitrariedad absoluta con que opera Santiago Nieto, pero esa arbitrariedad absoluta ya existía antes en el caso de Antorcha, en el caso de nuestros dirigentes y nosotros pedimos que la opinión pública nos reconozca víctimas de la UIF, como lo hacemos nosotros y todo México con los agricultores de Chihuahua” a los que dijo, respeta el antorchismo nacional y apoya en su lucha porque es justa.