Citlali Piña
|Como si de una película distópica se tratara, en medio de la gran crisis económica, social, política y sanitaria por la que atraviesa México, el Gobierno federal sólo se preocupa por afinar su artillería para las elecciones de 2021.
¡No hay mayor prioridad para ellos! Aparentemente, las crisis vienen y van, pero el poder debe conservarse. Y no lo digo por decir, México se está hundiendo y el poder ejecutivo no dice “está boca es mía”: desastres naturales; crisis sanitaria por causa de covid-19; devaluación del peso y recesión económica; represión política contra los opositores de AMLO, y el Gobierno federal brilla por su ausencia… ¡Ah! Pero no se trate de las elecciones de 2021 porque, para eso sí, se destinan todos los recursos humanos y económicos al alcance: que si se requiere dinero para comprar votos, “que se le quiten recursos a la cultura y la ciencia”; que si dinero para los programas asistencialistas y manipuladores del gobierno, “eliminemos los fideicomisos”; y así nos podemos seguir.
¿Por qué? Como ya dije, porque poco les importa al Gobierno, al partido en el poder y a su máximo líder el pueblo de México… para ellos, lo esencial es mantener el poder político de la nación, y dado que en 2021 estarán en juego 15 gubernaturas, deben movilizar todas sus piezas para ganar el juego que está comenzando a gestarse.
En ese sentido, ya se han hecho los famosos destapes (a los que recurre constantemente el PRI y que Morena, como buen alumno, retoma y mejora) de algunas figuras públicas que aspiran a cargos populares… pero, claro, lo han hecho con la venia de Andrés Manuel López Obrador. Y, dado que han sido uncidos por el mesías, su historial político y de corrupción queda, automáticamente, borrado y olvidado.
¿No me creen? Veamos casos particulares…
Tenemos primero al perro sabueso de la 4T: al intocable Santiago Nieto, quien en días pasados se subió al ruedo de la lucha política al asegurar que, si su jefe se lo permite, él se presentará como candidato a la gubernatura de Querétaro… Aunque estamos seguros que su jefe ya le dio el “sí”, porque es clarísimo que el perro, perdón, el hombre, no abre la boca si no se lo ordenan. No es difícil imaginar, ante esto, cómo será Santiago Nieto como gobernador; sólo queda decirles a los queretanos que, en caso de votar por él, tendrán a un verdadero gato del gato del patrón y serán ellos los que pagarán las consecuencias.
Uno más que se anotó a la lista de candidatos aprobados fue el secretario de Seguridad Ciudadana, Alfonso Durazo. Así es, amigos, otro policía de la 4T… ya pueden ir viendo hacia dónde nos quiere llevar Morena. Pero vuelvo al tema. Durazo dijo, en días recientes, que “contender por la gubernatura de Sonora sería una aspiración razonable en virtud de su trayectoria política, administrativa, etc”. Pues… que alguien por favor le recuerde (y al pueblo también) que nadie estaría orgulloso de ser responsable de las más de 63 mil muertes que han sucedido en el país tan sólo en lo que va de 2020; si ésa es su carta de presentación, ¿no será mejor que no se presente? Digo yo…