La Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió a los países europeos intensificar medidas preventivas ante la nueva cepa del coronavirus detectada en el Reino Unido y en algunos otros países de esa región.
“Es indispensable hacerlo para aplanar la empinada línea vertical. Tenemos que fortalecer las medidas”, señaló Hans Kluge, director de la OMS para Europa.
Estudios han comprobado que esta nueva variante puede propagarse hasta un 72 por ciento más rápido, pero no hay evidencia de que sea más letal que la primera cepa descubierta del SARS-CoV-2.
Funcionarios de salud también han descartado que las vacunas fabricadas hasta ahora contra el coronavirus no funcionen contra esta variante.
A pesar de esto, Londres sufre un serio incremento de casos que están llevando al sistema hospitalario al borde del colapso, a tal grado que el alcalde Sadiq Khan aceptó que se corre el riesgo de que no haya camas disponibles en los próximos días.
“Este virus está fuera de control. El Servicio Nacional de Salud está a punto de verse abrumado. No ha habido ningún momento durante esta pandemia en el que haya estado más preocupado”, aceptó el gobernamente.
Además del Reino Unido, esta nueva cepa se ha detectado en Estados Unidos, China, Países Bajos, Bélgica y recientemente autoridades de Perú reportaron el primer caso en su país.