En dos años, Paloma Aguilar pasó de ser asistente del presidente Andrés Manuel López Obrador a ocupar un cago en el Servicio de Administración Tributaria (SAT), y ahora precandidata de Morena al gobierno de San Luis Potosí.
Paloma Rachel Aguilar Correa ya fue candidata morenista a diputada local y federal, aunque no logró los votos para llegar al Congreso.
En 2018 fue incorporada a la Ayudantía presidencial, un cuerpo de “guardias civiles” que tiene la función de acompañar a López Obrador a sus giras para recoger peticiones ciudadanas y abrirle el paso entre simpatizantes. Los integrantes de la Ayudantía cobran 46 mil 337 pesos brutos al mes.
Tras unos meses de servicio, en julio de 2019, Aguilar Correa fue contratada en el SAT a cargo del área de Administración General de Recursos y Servicios, con un sueldo mensual bruto de 149 mil 407 pesos, pese a que no tiene experiencia en la elaboración de presupuestos y la gestión de recursos humanos, materiales y financieros, de acuerdo con su curriculum.
Una vez en el cargo, se llevó de la Ayudantía al SAT a su pareja, Javier Portugal Dorantes, y lo colocó como administrador central de Servicios Tributarios al Contribuyente, con un sueldo de 115 mil 220 pesos mensuales brutos. Portugal Dorantes tampoco tiene experiencia en temas fiscales, pues solo cuenta con estudios universitarios en Ciencia Política y Administración Pública y trabajó como asesor legislativo.
Recientemente, la dirigencia de Morena decidió repetir el registro de precandidaturas para San Luis Potosí, a fin de que solo se registren aspirantes mujeres, en atención al requisito de postular a candidatas en 7 de los 15 estados con elección de gubernatura este 2021.