La Cámara de Representantes entregó este lunes al Senado el cargo de juicio político en contra del expresidente Donald Trump por acusaciones de incitar a la insurrección en el Capitolio a principios de este mes, dando así inicio a un proceso que podría prohibir que el republicano regrese a la Casa Blanca.
Los nueve gerentes de juicio político de la cámara baja, tras cruzar por los pasillos del Capitolio de Estados Unidos que partidarios del exmandatario invadieron en un letal asalto que dejó cinco muertes, llevaron el cargo a la cámara alta, donde el representante de Maryland Jamie Raskin leyó el cargo contra Trump.
“El presidente Trump puso bajo grave peligro la seguridad de Estados Unidos y sus instituciones de gobierno”, señala el acta de juicio político de cuatro páginas. También argumenta que Trump amenazó la integridad del sistema democrático, interfirió con la transición pacífica del poder y “traicionó” la confianza de la ciudadanía.
Trump es el primer presidente de la historia de Estados Unidos en ser sometido a juicio político en dos ocasiones y, cuando el Senado se reúna para este proceso, será el primero en ser juzgado después de dejar el cargo.
Aunque el martes se juramentará a senadores para que se desempeñen como jurados, los argumentos de apertura serán postergados hasta inicios de febrero. El líder de la mayoría en la cámara alta, Chuck Schumer, anunció el calendario tras aclanzar un acuerdo con los republicanos, que habían propuesto retrasar el juicio para que la defensa del expresidente tenga tiempo de revisar el caso.
De declararlo culpable, la cámara alta podría votar para prohibir que Trump vuelva a ocupar un cargo público, lo que afectaría las posibilidades del expresidente de regresar a la política.
El demócrata Patrick Leahy, el integrante más antiguo del Senado, dijo el lunes que presidirá el juicio político contra Trump.
El presidente de la Corte Suprema, John Roberts, presidió el primer juicio político contra Trump el año pasado, tal y como lo exige la Constitución de Estados Unidos. Pero los senadores pueden liderar los procedimientos cuando quien enfrenta el juicio político no es el presidente en funciones.