El presidente de Rusia, Vladímir Putin, y su homólogo estadounidense, Joe Biden, mantuvieron este martes su primera conversación telefónica, en cuyo marco abordaron varias cuestiones de las relaciones bilaterales entre Moscú y Washington.
De acuerdo con un comunicado del Kremlin, Putin felicitó a Biden por el inicio de su mandato y destacó que la normalización de las relaciones entre ambos Estados serviría a sus intereses y, «teniendo en cuenta su responsabilidad especial por el mantenimiento de la seguridad y estabilidad en el mundo, [a los intereses de] toda la comunidad internacional».
Los mandatarios «expresaron su satisfacción por la realización hoy del intercambio de las notas diplomáticas sobre el logro de un acuerdo» sobre la extensión del Tratado de Reducción de Armas Estratégicas, también conocido como START III. Desde el Kremlin señalaron que ambas partes concluirán en los próximos días «todos los procedimientos necesarios, que garanticen el funcionamiento ulterior de este mecanismo jurídico internacional importante de la limitación mutua de los arsenales» de misiles nucleares.
Asimismo, los dos presidentes discutieron «temas de actualidad de la agenda bilateral e internacional», como la retirada unilateral de EE.UU. del Tratado de Cielos Abiertos, el «problema de la preservación» del Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA) sobre el programa nuclear iraní, la resolución de la situación en Ucrania a nivel nacional y la iniciativa rusa de celebrar una cumbre de miembros del Consejo de Seguridad de la ONU.
Putin y Biden además «consideraron las posibilidades de cooperación» en la lucha contra la pandemia del coronavirus, así como en otros ámbitos, incluido el comercial y económico. «En general, la conversación entre los líderes de Rusia y EE.UU. fue de carácter profesional y franco. Se acordó mantener contactos», reza el comunicado del Kremlin.
La conversación entre los dos mandatarios fue comentada también por la vocera de la Casa Blanca Jen Psaki. «[Biden] llamó al presidente Putin esta tarde con la intención de discutir nuestra voluntad de extender START III por cinco años y también para reafirmar nuestro firme apoyo a la soberanía de Ucraina frente a la agresión incesante de Rusia y también para plantear cuestiones que preocupan», declaró Psaki.
«Su intención también era dejar en claro que EE.UU. actuará con firmeza en defensa de nuestros intereses nacionales y en respuesta a las acciones malignas de Rusia», agregó la portavoz.