La reducción de las actividades económicas en busca de controlar la expansión de la pandemia podría generar hasta 9.8 millones de nuevos pobres en el país y aumentar hasta en 10.7 millones la población en pobreza extrema, estimó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Al presentar su Informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (IEPDS) 2020, el Consejo subrayó que, a pesar de una ligera disminución en el porcentaje de población en pobreza laboral, entre abril y septiembre del año pasado se registró un aumento de 35.7% a 44.5% en ese indicador.
Añadió que también se observó un aumento de 3.4% a 5.2% en la desocupación registrada entre el primer y tercer trimestre de 2020 y un aumento considerable en la tasa de subocupación, que pasó de 8.5 a 17% entre abril y septiembre, no obstante que la tasa de informalidad se redujo en el periodo de 56.1% a 54.2%.
Entre marzo y diciembre de 2020, se registró la pérdida de 709 mil 211 empleos inscritos en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), destacó el Coneval.
“Existe el riesgo de que las afectaciones de la pandemia por Covid-19 reviertan los avances obtenidos en la reducción de las carencias sociales hasta 2018”, advirtió.
Para un sector de la fuerza laboral, aproximadamente 2.7 millones de personas que al primer trimestre de 2020 trabajan en el sector salud, la pandemia incrementó exponencialmente los riegos para su salud, pues se vieron de pronto laborando en la primera línea de atención a la pandemia.
Destaca el hecho de que, de ese total, 1.7 millones son mujeres, lo que equivale a cerca de 63% de la población ocupada de ese sector.
“La población que labora en este sector ha experimentado un incremento significativo en la carga laboral, así como una mayor exposición al riesgo de contagio de la Covid-19 y, del total de esta población, las mujeres representan casi dos terceras partes”, subraya Coneval.
La crisis sanitaria produce afectaciones en el acceso a los derechos de la población, pero a la vez podría producir un aumento de entre 8.9 millones y 9.8 millones de personas con ingreso inferior a la Línea de Pobreza por Ingresos, y de entre 6.1 y 10.7 millones con ingreso inferior a la Línea de Pobreza Extrema por Ingresos, detalló el organismo
“Por ello, es primordial garantizar a la población el acceso básico a los bienes y servicios que hacen posible el ejercicio de los derechos sociales”, recomendó.
Efectos de la pandemia
Coneval citó al Instituto de Investigaciones para el Desarrollo con Equidad (EQUIDE), que en su estudio Seguridad alimentaria de los hogares mexicanos frente a los retos del Covid-19, plantea que la pandemia podría derivar en el incremento de la inseguridad alimentaria, principalmente en los hogares de menor nivel socioeconómico, poniendo en riesgo los avances logrados en este campo.
Alertó también acerca de afectaciones al derecho a la educación derivadas del tránsito al modelo de enseñanza virtual, en particular del acceso desigual a las tecnologías de la información que puede afectar la calidad educativa.
“Lo anterior puede incidir negativamente en el avance logrado en materia de rezago educativo, así como en el desempeño escolar y la permanencia en el sistema”.
Entre las recomendaciones emitidas por el Consejo está, con carácter de urgente, la necesidad de reforzar la atención a grupos vulnerables y garantizar a la población el acceso a los bienes y servicios que hacen posible el ejercicio de sus derechos.
Y aunque identificó que el esquema de coordinación de la operación de los programas prioritarios busca promover la eficiencia mediante la reducción del número de intermediarios, señaló que existen oportunidades de mejora en la comunicación entre actores, la calidad de la información del Padrón Único de Beneficiarios, la mejora continua y difusión de calendarios de los programas, así como en la capacitación de los Servidores de la Nación.
Respecto de la respuesta del gobierno a Covid-19, Coneval identificó 53 intervenciones, de las cuales 31 son programas presupuestarios y 22 acciones no presupuestarias.
Añadió que las intervenciones fueron modificadas o creadas con el objetivo de incentivar las capacidades del personal de salud y la investigación científica sobre el Covid-19; mejorar las condiciones de ingreso, servicios básicos en la vivienda y seguridad social; brindar atención médica y psicológica a los grupos con mayor vulnerabilidad ante la emergencia, y proporcionar apoyos alimentarios y crediticios.