El gobierno chino lanzó oficialmente ayer un pasaporte digital que permite verificar la situación sanitaria de los viajeros, una iniciativa que analizan Estados Unidos y Europa.
El “certificado sanitario para los viajes internacionales” lanzado por Pekín -aplicación para smartphones que muestra y verifica el historial de vacunación y las pruebas de covid- podría contribuir a una apertura de fronteras. Por el momento, no es obligatorio y está reservada a los chinos.
Estados Unidos y el Reino contemplan adoptar sistemas similares. En la Unión Europea (UE), la idea del “pasaporte verde” será presentadas por la Comisión Europea el 17 de marzo.