Por segundo año consecutivo, México fue excluido del Índice de los 25 países más atractivos como destino para la Inversión Extranjera Directa (IED).
En videoconferencia, el director general de la firma consultora Kearney, Ricardo Haneine Haua, señaló que las principales causas que provocaron que México no sea atractivo para los 500 altos ejecutivos de las principales corporaciones del mundo consultados son:
El bajo crecimiento de la actividad económica; cambios en reglas como la Ley Eléctrica, rondas de exploración y producción; proyectos de generación de energía eléctrica limpia; la reforma sobre subcontratación, y la extinción de fideicomisos públicos.
Asimismo, “decisiones de inversiones en infraestructura del gobierno federal de alto costo y bajo impacto; cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, y la priorización de inversiones de bajo impacto económico y social en el entorno actual como la refinería de Dos Bocas, el Aeropuerto de Santa Lucía y el Tren Maya”, explicó Henaine Haua.
El también miembro del Consejo Asesor del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y del Consejo Asesor Global de Booth School of Business recordó que, pese a que el país ha impulsado y se ha visto beneficiado por algunas iniciativas como la ratificación del T-MEC, “no fue suficiente para que los inversionistas catalogaran a México como uno de los principales objetivos de inversión”.
Para el representante de Kearney, nuestro país “requiere fortalecer e incentivar factores relacionados a la gobernanza e innovación y tecnología para motivar la atención de los inversionistas”.
Añadió: “Las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China y la ratificación del T-MEC han venido abriendo oportunidades en México para atraer inversiones enfocadas a la exportación de manufacturas hacia Estados Unidos de América, las cuales se pueden potenciar si se sigue una estrategia proactiva y coordinada en México”.
Estados Unidos continúa liderando el Índice de Confianza de IED, seguido por Canadá, Alemania, Reino Unido, Japón, Francia, Australia, Italia, España y Suiza.
En el lugar 11 está Holanda y continúan China, Nueva Zelanda, Suecia, Emiratos Árabes Unidos, Singapur, Bélgica, Noruega, Austria, Portugal, Corea del Sur, Dinamarca, Irlanda, Brasil y Finlandia.
Sólo tres mercados emergentes están en el Índice de este año: China, Emiratos Árabes Unidos y Brasil.
“China sigue siendo el mercado emergente mejor clasificado, una distinción que el país ha mantenido constantemente desde 1999. Sin embargo, la preocupación por el escalamiento de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, y un replanteamiento empresarial más general de las cadenas de suministro internacionales podrían explicar su caída al décimo segundo lugar”, según el reporte.
Asimismo, la virtual desaparición de los mercados emergentes y fronterizos del Índice podría ser un reflejo de que los inversionistas consideran que el despliegue de vacunas en los mercados emergentes será muy desigual, tanto por factores logísticos como económicos.
El estudio reveló que la clasificación de este año apunta a una continua aprensión e incertidumbre sobre la rapidez con la que la economía global se recuperará después del covid-19.
Además de la caída en la confianza de la economía, la mayoría de las puntuaciones generales de los 25 países principales han caído en comparación con años anteriores. Sólo el 57% de los inversionistas se manifiestan optimistas sobre la perspectiva económica mundial a tres años, cifra mucho más baja a la del año pasado (72%).