El 66.6 por ciento de mexicanos mayores de 18 años considera que vivir en su ciudad es inseguro debido a la violencia creciente, según los resultados del trigésimo primer levantamiento de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), realizada por el INEGI en la primera quincena de junio de 2021.
Durante ese mes, los encuestados revelaron que vivir en su ciudad es inseguro. Este porcentaje representa un cambio con respecto del registrado en diciembre de 2020, que fue de 68.1 por ciento. Sin embargo, no representa un cambio estadísticamente significativo con respecto de marzo de 2021, que fue de 66.4 por ciento.
En esta edición, 12 ciudades tuvieron cambios significativos con respecto de marzo de 2021: 4 tuvieron reducciones y 8 incrementaron. La percepción de inseguridad siguió siendo mayor en el caso de las mujeres con 71.3 por ciento mientras que para los hombres fue de 60.9 por ciento.
Las ciudades con mayor porcentaje de personas de 18 años y más que consideraron que vivir en su ciudad es inseguro fueron: Fresnillo, Cancún, Ecatepec de Morelos, Coatzacoalcos, Naucalpan de Juárez y Tonalá, con 96.2, 88.7, 87.7, 86.9, 86.7 y 86.1 por ciento, respectivamente.
Por otro lado, las ciudades con menor percepción de inseguridad fueron: San Pedro Garza García, Tampico, Los Cabos, San Nicolás de los Garza, Mérida y Piedras Negras, con 7.1, 24.4, 25.4, 25.9, 26.3 y 28.8 por ciento, respectivamente.
Cabe destacar que, de los 50 municipios más violentos del país, 31 son gobernados por el partido Morena, 7 por el PAN, 7 por Movimiento Ciudadano, 2 por el PRD, 2 por el PRI y uno por un alcalde sin partido, según cifras oficiales.
En el mismo, sentido, los registros del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) revelan que los 50 municipios más violentos concentraron 48.3 por ciento de homicidios dolosos ocurridos entre diciembre de 2018 y mayo de 2021.
En tanto la violencia aumenta, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que trabajara en los próximos días con gobernadores electos y en funciones de todos los estados del país para hablar de cómo enfrentar la violencia.
Este plan se da a casi dos años y medio de que López Obrador sea presidente. Mientras, la violencia no disminuye, incrementan las víctimas y el presidente desde su conferencia matutina se empeña en hablar sobre la encuesta que, según afirma, busca enjuiciar a expresidentes.