La escasez de agua potable representa un problema cada vez más grave en la Ciudad de México (CMDX) debido a la falta de inversión en los sistemas de abastecimiento, al crecimiento demográfico, a su desperdicio inconsciente; y a la inexistencia de un proyecto que permita resolver las complicaciones que de ello se derivan.
Por: Abigail Cruz
Especialistas, alcaldes, diputados federales y locales denunciaron que hay otro factor que está agudizando la escasez: la posible manipulación de válvulas de distribución para provocar reclamos ciudadanos a los alcaldes de oposición que en los comicios del pasado seis de junio derrotaron a los candidatos del partido oficial Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Esta maniobra se aplica en las alcaldías de la región poniente de la CDMX, donde la oposición logró más posiciones electorales; y donde los vecinos ahora realizan movilizaciones de protesta en demanda de agua potable; y cada día que pasa hay menos familias con acceso al vital líquido; o si llega el suministro, es irregular y en pésimas condiciones para su consumo.
Para la alcaldesa de Azcapotzalco, la panista Margarita Saldaña, la solución al problema del agua concierne principalmente a los gobiernos de la CDMX y Federal: “nosotros lo único que tenemos al alcance son pipas; pero la gente ya está cansada de recibir el agua mediante pipas. Se tiene que hacer un plan integral para que la CDMX tenga agua suficiente para las personas que viven en ella”, aseguró la funcionaria.
Su alcaldía es una de las más afectadas por la falta de agua. Hace unos días, los pobladores protestaron y cerraron las avenidas principales de la demarcación, como lo han efectuado desde hace varios meses. Hubo un periodo en el que no llegó agua a la mayoría de colonias y fue necesario llevarla en pipas para dotar a las familias, así como a gran parte de las escuelas públicas.
Funcionarios del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACDMX) acudieron a la demarcación e hicieron compromisos con los vecinos que no cumplieron; y eso originó que éstos volvieran a protestar en las calles para exigir la satisfacción de su demanda.
“Los manifestantes ya no pedían la presencia de la alcaldía en su segunda protesta, sino la presencia de la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum; entonces, si no atendemos este problema de manera integral, vamos a seguir teniendo cierres de calles, que yo les he dicho a los vecinos: ¿de qué sirve que me cierren una calle o una avenida o arteria importante de Azcapotzalco, si esto no llega realmente a ser el efecto que ellos están esperando? Y es que la autoridad federal y la autoridad local del gobierno capitalino no se dan cuenta que tenemos un serio problema de escasez de agua al que se le tiene que poner atención; una atención específica y decirnos cuál va a ser la solución”, denunció Margarita Saldaña.
Los alcaldes de oposición denunciaron que no hay un programa para resolver la falta de agua en la CDMX. “Sabemos que quieren hacer algo que se llama sectorización y que, a grandes rasgos, lo que yo entendí es sectorizar para evitar fugas de agua y algunas otras cuestiones; pero no nos han dicho más sobre algún programa o método para que ya no sigamos padeciendo la carencia del vital líquido en Azcapotzalco y el resto de las alcaldías”, agregó la alcaldesa.
Para varios especialistas, lo prioritario consiste en atender los problemas que hay en torno a la infraestructura hidráulica, que ha estado abandonada y ocasiona que alrededor del 40 por ciento del líquido se pierda en fugas de tubería, las cuales se remedian con la distribución de agua en pipas; y representan “un mejoralito”. Por ello resulta indispensable atacar el problema a fondo.
En Tlalpan, la alcaldesa Alfa Eliana González denunció la falta de recursos para comprar pipas, debido a que le dejaron la tesorería “en ceros… pero en cambio –denunció– recibimos un punto de acuerdo en el que Morena nos exige que se garantice y se abastezca de agua a varias colonias y asentamientos humanos, aun los catalogados como irregulares”.
González argumentó que así como exige que haya abastecimiento del vital líquido, ese mismo interés debe reflejarse en el presupuesto del próximo año. “Los diputados de Morena votaron el año pasado para que subiera el costo del agua, cuando hoy Tlalpan padece sed por no contar con agua suficiente para todas y cada una de sus colonias”, denunció.
Tlalpan fue gobernada por Claudia Sheinbaum, quien a la fecha despacha como Jefa de Gobierno. Esta demarcación sufre la escasez de agua potable desde hace varios años y hasta hoy el problema no se ha resulto.
En Tláhuac, el abasto de agua es cada vez más grave. Las fallas empezaron a raíz de que se cerraron dos pozos que se dañaron con los sismos de septiembre de 2017 y ahora continúan sin reparación. Los habitantes de 27 colonias de la demarcación son los más afectados por la escasez.
En días pasados, Mauricio Tabe, alcalde de Miguel Hidalgo, declaró a la Jefa de Gobierno: “El problema de escasez de agua tiene que ver con la operación del plan hídrico de la ciudad que corresponde al gobierno capitalino. El gobierno de la CDMX tiene que presentar un plan hídrico al Cabildo y ése ya lo solicitamos; debe presentar un programa de obras públicas para garantizar el desarrollo. Nosotros no podemos estar en contra de los programas de desarrollo, de lo que estamos en contra es de que no se inviertan los recursos para obras de reforzamiento hidráulico y garantizar el abasto del agua a las colonias y pueblos de la CDMX”.
Lía Limón García, alcaldesa de Álvaro Obregón, señaló que el problema del agua en su demarcación es “muy complejo” porque va más allá del suministro y acusó a las autoridades locales y Federales de no atender el problema: “No se ha presentado un programa integral y éste debe ser presentado a la brevedad”.
Denunció que desde el 1° de octubre, fecha en que tomó posesión del cargo, se ha encontrado con colonias enteras sin agua, problema que ha informado a las autoridades del gobierno capitalino, que no le han dado ninguna solución. “Pareciera que, para ellos, el problema del agua no tiene importancia”; y no descartó que la escasez de ésta se deba a la manipulación de válvulas, y a que éstas solo se estén abriendo para la alcaldía Iztapalapa, hoy gobernada por Morena. La alcaldesa no descartó la posibilidad de que los Gobiernos Federal y de la CDMX, ambos de Morena, estén aplicando un castigo político a quienes votaron por los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática (PRD).
Sobreexplotación y cambio climático
El sistema de aguas de la CDMX opera con una red de 26 mil kilómetros, que ya está muy dañada, pues tiene más de 50 años de antigüedad; por ello con mucha frecuencia se presentan fugas que provocan inundaciones que, además, se deben a que el sistema no tiene capacidad de desagüe.
La escasez de agua se debe a que se extrae el doble de la que se recarga; y este problema, de acuerdo con los expertos, se agrava cada año. En 2018, el 70 por ciento de la población de la capital del país recibía menos de 12 horas continuas de agua al día; hoy obtiene menos horas al día.
En junio pasado, una docena de alcaldías de la capital del país padecieron la reducción de su abastecimiento de agua durante 36 horas, ya que su flujo pasó de 13.2 a 9.1 metros cúbicos por segundo debido a la ejecución de reparaciones en la estación de bombeo número 4 del sistema Cutzamala, una de las principales fuentes de suministro.
El 19 de junio se anunció una nueva reducción en el abasto de agua potable en la capital de la República, debido a la sequía que aquejaba al sistema de Cutzamala, que provee el 14.1 por ciento de los 60 metros cúbicos por segundo (unos 60 mil litros) que consumen los 21 millones de personas que viven en la CDMX y su zona metropolitana.
Federico Döring Casar, diputado local del PAN, dijo a buzos que los proyectos que garantizaban la viabilidad hídrica de la CDMX fueron elaborados por los gobiernos del PRI, entre los cuales se hallaba un acueducto perimetral para evitar las fugas de agua. Esta obra, sin embargo, fue cancelada por Cuauhtémoc Cárdenas cuando ocupó la jefatura de Gobierno de la CDMX en el periodo 1997-2000. La siguiente administración, a cargo del PRD (2000-2006), estuvo en manos de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), y tampoco se dio continuidad a la obra.
“Desde 2000 y hasta 2006 hubo cero inversiones en agua; y tampoco se invirtió nada en el Sistema de Transporte Colectivo Metro (STC-Metro); lo único que se invirtió fue lo que hicieron el entonces jefe de gobierno Marcelo Ebrard y el expresidente, Felipe Calderón, para el túnel Emisor-Oriente. Es decir, se avanzó en la red de aguas negras; pero desde 1997 no se ha invertido en ningún proyecto nuevo, grande e importante de agua potable”, detalló el legislador.
Döring supone que la falta de agua en las alcaldías gobernadas hoy por la oposición y agrupadas a la Unión de Alcaldes de la Ciudad de México, (UNACDMX), se debe a un “sabotaje” y consideró que “eso sí es mala leche política” de la administración encabezada por Claudia Sheinbaum.
“Desde que ganaron los alcaldes del PAN, PRI y PRD, les dejaron el dinero etiquetado para pagar sueldos y para vivir, como se dice coloquialmente, con una mano atrás y una adelante. Quieren sabotearlos. Lo que intenta hacer Claudia Sheinbaum es que les vaya mal a los alcaldes de oposición para que la gente se enoje con esos nuevos gobiernos y que, en la revocación de mandato del próximo año, ella pueda entregar mejores resultados a AMLO. Lo anterior debido a que Sheinbaum quedó reprobada tanto en las urnas como en la consulta popular; ella le rindió malas cuentas al Presidente. Ahora trata de enamorar a las alcaldías que aún conserva Morena dándoles buenos servicios y usando el sabotaje para los alcaldes que ganó la oposición”, denunció.
El también exsenador de la República no descartó que pudiera haber una manipulación de las válvulas por los trabajadores del sistema de aguas capitalino, lo cual no sería nuevo porque, en la alcaldía Miguel Hidalgo, específicamente entre las calles Observatorio y Constituyentes, donde se distribuye el agua, de repente falta ésta en la alcaldía Álvaro Obregón; y sí hay en Miguel Hidalgo, o viceversa.
“Hay un truco de los empleados del sistema de aguas que abren y cierran válvulas y que administran el líquido, porque ellos lo hacen por corrupción, para que te obliguen a pagar la compra de pipas; pero también lo pueden hacer por instrucciones políticas, para que alguien quede mal y no para forzarte a comprar el agua, sino para hacerte la vida miserable y desprestigiar al gobierno de las alcaldías y, por ende, obligarte a comprar las pipas para el abastecimiento de agua en las diferentes colonias en donde no llega el vital líquido”, denunció.
Otro problema que afecta a los más de 10 millones de habitantes que viven en la CDMX consiste en la antigüedad de las redes de agua potable, ya que tienen más de 40 años y por eso reportan muchas fugas, un problema que las autoridades no tienen interés en resolver.
Döring sugirió, a la jefa de gobierno de la CDMX, que dé prioridad en el gasto público a la reparación y renovación de la infraestructura hídrica, pues insistió en que desde 1997 no se le ha destinado ningún recurso público; y que si tiene problemas de caja, no dude en contratar deuda, ya que ésta se recuperará “con los cobros de los derechos del agua”.
El legislador se opuso a los aumentos en las tarifas del agua e indicó que, en la medida que se le invierta, se recobra la inversión. “Un ejemplo es lo del Metro, aunque subas la tarifa tiene una fuente de repago. Te puedes endeudar con algo que, aunque tardes mucho en pagar, sabes que a la larga te va a generar recursos y vas a poder pagar esa deuda”, agregó.
Consideró necesario cobrar el agua que se distribuye a través de pipas, pero que ese costo se base en estudios socioeconómicos. “Si tu regalas el agua de las pipas, la gente entonces nunca va a cuidar el agua, va a creer que no tiene valor y que no se debe cuidar; por lo que se debe entender que hay un peso o un piso mínimo; y que hay muchas desigualdades en nuestra ciudad, y que hay gente que la puede pagar en un precio, pero habrá otra que necesite apoyo. Ahí sí los alcaldes deben apoyar poniendo un porcentaje mínimo para apoyar a sus gobernados si están en colonias muy amoladas”.
En ese mismo sentido se pronunciaron los diputados locales y federal, Luisa Gutiérrez, Víctor Hugo Lobo Román y Marcelino Castañeda Navarrete, respectivamente. Este último mencionó que la CDMX, y particularmente en Iztapalapa, la falta del agua es un problema preocupante, ya que “sufrimos de manera constante la escasez, incluso la falta de suministro en su totalidad”.
El diputado federal, quien nació y creció en esa alcaldía, afirmó que la falta de agua los obliga a comprar pipas y agua de garrafones para satisfacer las necesidades más indispensables como la comida, lavar trastes y el aseo personal.
Respecto al tandeo de agua por pipas, el también secretario de la Comisión de Hacienda y Crédito Público en la Cámara de Diputados advirtió que es insuficiente y caro, ya que a pesar de que su consumo debe ser gratuito y representa un derecho, muchos vecinos pagan por dicho servicio cantidades que van desde 300 a 800 pesos por pipa, lo que resulta un gasto excesivo en los hogares iztapalapenses.
“Es lamentable que, en muchas ocasiones, se esté desperdiciando este líquido vital por causa de una fuga en la red hidráulica, y que ésta tarde días en ser atendida por parte de la autoridad, sin que nadie sea sancionado por tal omisión”, denunció el legislador del PRD.
Señaló que los problemas de Iztapalapa con el agua potable derivan tanto de que representa la alcaldía más poblada de la capital del país como porque su orografía dificulta la subida sin un sistema de bombeo eficiente, el cual significa una demanda adicional de su población.
El diputado federal recomendó al gobierno capitalino recurrir a expertos en el tema y analizar la posibilidad de crear pozos de infiltración de agua para captar agua de lluvia, alimentar los mantos acuíferos; revisar la red hidráulica secundaria e invertir lo necesario para evitar las fugas, así como adquirir maquinaria adecuada que permita subir el agua a las zonas altas.
Riesgos de una crisis hídrica
Para la presidenta de la Comisión de Agua en el Congreso capitalino, Luisa Adriana Gutiérrez, la escasez de agua potable es un problema que debe resolverse en lo inmediato para evitar que las próximas generaciones lo padezcan también. El exdiputado Jorge Palacios coincidió con este punto de vista y denuncio:
“Magdalena Contreras es un ejemplo, pelean por su agua y defienden su río, pero también se está convirtiendo en una cuota política; además, la disputa por las pipas, los tandeos y en zonas precarias económicamente no cuentan con el suministro y tienen que pagarla a precios elevados”.
Criticó a los gobiernos Federal y local por estar más preocupados en cambiar los medidores de agua para cobrar el líquido en zonas donde se carece, pero en lo que “no los veo preocupados es en ver cómo solucionar que se deje de desperdiciar el agua, que no haya fugas y que haya un programa que funcione y que sea integral”.
“Se prevé que, si no hacemos nada para 2030, tendremos severas crisis de agua. Hoy el gobierno local y Federal no hacen nada para solucionar el problema”, alertó. La falta de agua en la capital del país –agregó– alcanza a otras alcaldías; y citó el caso de Magdalena Contreras, Cuauhtémoc, Tláhuac, Coyoacán, Venustiano Carranza, Azcapotzalco, entre otras demarcaciones.
Por su parte, Víctor Hugo Lobo Román, coordinador de la bancada del PRD en el Congreso de la CDMX afirmó que “es inexplicable la falta de agua, porque ha sido un año atípico de precipitaciones pluviales, lo que garantiza el suministro de agua en las fuentes de alimentación de la CDMX, cosa que no está ocurriendo”.
Aseveró que el problema se debe a la desatención del SACDMX, además de a la falta de bombeo, en el mantenimiento de los pozos de extracción y los tanques. “Hay afluentes que permiten la llegada del vital líquido y no hay explicación o motivo por el que haya tanta carencia de agua en la CDMX, especialmente cuando no se está en época de estiaje”.Lobo Román coincidió con Gutiérrez Ureña en que, si no hay una solución inmediata, “estaremos muy cerca de una crisis hídrica”, hecho que “nunca se había visto en la Capital del país y que el tema debería estar en la agenda capitalina”.