El canciller alemán, Olaf Scholz, ha sentenciado que tras la reciente escalada del conflicto entre Occidente y Rusia por la ocupación de Ucrania, es imposible considerar la aprobación del gasoducto Nord Stream 2. Así lo ha afirmado este martes, mientras los ministros de relaciones exteriores de la UE discuten en Bruselas un paquete de sanciones económicas que podría aislar al Kremlin del sistema financiero europeo tras su reconocimiento de la independencia de las regiones separatistas ucranianas de Donetsk y Lugansk. El millonario proyecto, que podría duplicar los envíos directos de gas ruso a Alemania a través del báltico, es de suma importancia económica para Moscú.
«La decisión de ayer sobre Ucrania por parte del presidente ruso es una grave violación del derecho internacional. Debe respetarse la integridad territorial y la soberanía de cada país. Nuestra reacción internacional estará bien coordinada, dirigida y basada en investigación precisa. Ha habido un cambio dramático en la situación, y ahora debemos reevaluar; esto incluirá al Nord Stream 2. He pedido a nuestro Ministerio de Asuntos Económicos que realice un nuevo análisis de la seguridad del suministro energético. En las circunstancias actuales, la certificación no es posible» ha afirmado el canciller alemán en su cuenta de Twitter.
El gobierno Ucraniano ha celebrado la decisión de los alemanes: «Este es un paso moral, político y correcto en las circunstancias actuales. El verdadero liderazgo significa decisiones difíciles en tiempos difíciles. La medida de Alemania demuestra precisamente eso», ha afirmado el ministro de relaciones exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba. Por su parte, el ministro de Energía ruso, Nikolái Shulginov, aseguró este martes que su país se compromete a cumplir los contratos con los países europeos y a seguir exportando el gas natural «sin interrupciones».
Los ministros de relaciones exteriores de la Unión Europea han «mostrado unanimidad» respecto a la necesidad de aplicar sanciones a Rusia en su reunión de este martes en Bruselas. Según un comunicado conjunto de la Comisión Europea y el Consejo de Europa, el paquete de sanciones en discusión podría afectar a los individuos involucrados en la «decisión ilegal» de reconocer a la independencia de los territorios, a los bancos que están financiando al ejército ruso y las operaciones en esta región, a la capacidad del estado y el gobierno rusos para acceder a los servicios y mercados financieros y de capital de la UE, y al comercio de las dos regiones separatistas hacia y desde la UE.