El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, criticó a Estados Unidos por excluir a su país de la Cumbre de las Américas y tachó la cita de oportunidad perdida por una política trasnochada, discriminatoria e injerencista de Washington.
“Cambió Cuba, cambió nuestra América. Pero el imperio no cambió”, aseguró Díaz-Canel en un discurso en el Palacio de la Revolución (sede del gobierno) sobre los excluidos de este encuentro en Los Ángeles (EE.UU.), al que este miércoles se suman los jefes de Estado y Gobierno.
Cambió #Cuba, cambió Nuestra América, pero el imperio no cambia. pic.twitter.com/bOBVLUiMTS
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) June 8, 2022
La Cumbre de las Américas reedita en su opinión la doctrina Monroe -resumida en la frase “América para los americanos”- y es un “espectáculo de tinte neocolonial” del que no se puede esperar una “discusión de fondo”.
Por eso, consideró un mérito no estar en la reunión de Los Ángeles: “Nos honra encabezar lista (de excluidos) junto a Nicaragua y Venezuela“.
Díaz-Canel atacó asimismo el argumento de la Casa Blanca para excluir a Cuba, Nicaragua y Venezuela por no ser democráticos y afirmó que “EE.UU. carece de autoridad moral para hablar de democracia”, cuando no la promueve ni dentro ni fuera de sus fronteras.
Señaló que Washington equipara democracia y capitalismo, cuando a su juicio son “conceptos contrapuestos”, y aseguró que “la democracia y la promoción de los derechos humanos no parecen los principios de su política exterior”.
En su opinión, la cita no va a abordar “los problemas más graves de América Latina y el Caribe”, como las causas de la migración, el desarrollo económico, la desigualdad, el racismo, la discriminación, la transferencia de tecnología, sino que es tan solo un “espectáculo publicitario” dirigido a la “politiquería interna” de EE.UU.
Sobre migración, dijo que está relacionada con el subdesarrollo que provoca el sistema económico y el neoliberalismo y que las “fórmulas represivas” que propone EE. UU. “no son la respuesta” a sus causas.
En el caso concreto de la migración cubana, que ha crecido de forma notable en los últimos meses, señaló que EE.UU. está aplicando la “receta perfecta” para promover la migración irregular desde su país al mantener las sanciones económicas a la vez que da facilidades a los cubanos que llegan a su territorio.
El presidente cubano lamentó que EE.UU. desaproveche la ocasión de haber hecho un “aporte trascendental” a la región. “Podría haber sido de otra manera”, dijo Díaz-Canel, quien señaló que para eso era preciso “humildad”, “autocrítica”, “respeto” y “solidaridad” por parte de Washington.
Aprovechó su intervención también para resaltar el “repudio” general que han provocado en la región las exclusiones de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Agradeció en este punto las “notables ausencias” de líderes que en protesta al veto de Washington no han acudido a la Cumbre de las Américas, como la del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Exclusiones a la sociedad civil
Díaz-Canel denunció la exclusión de representantes gubernamentales de Cuba, Nicaragua y Venezuela, pero destacó también que algunos miembros de la sociedad civil progubernamental de Cuba no han podido viajar a EE.UU.
“No se conforman con decir quién y cómo debe ser el Gobierno cubano, ahora se proponen definir quiénes son los representantes de la sociedad civil”, criticó el presidente.
Según las autoridades cubanas, 145 representantes de la sociedad civil progubernamental fueron invitados a la Cumbre de los Pueblos, un foro alternativo que se celebra de forma paralela en Los Ángeles, pero no obtuvieron visado.
“Lamentamos no tener una participación significativa” en la Cumbre de los Pueblos, agregó.
El Gobierno cubano y algunos de estos representantes de la sociedad civil individualmente han acusado al consulado de EE.UU. en La Habana de haberles denegado el visado por motivos políticos.
La legación diplomática ha indicado en Twitter que los visados de no migrante que solicitaron no se tramitan allí desde 2017 -a raíz de unos incidentes de salud aún no aclarados-, sino en Guyana. Negó haber denegado visados.
Por su parte, al menos tres activistas cubanas críticas con el Gobierno han denunciado en los últimos días que las autoridades de su país no les han dejado viajar a EE.UU. para participar en foros para la sociedad civil de la Cumbre de las Américas.
Una de ellas, Saily González, explicó a Efe que ella se postuló, recibió una invitación de la Cumbre de las Américas y logró un visado de negocios para viajar a Los Ángeles en el consulado estadounidense en La Habana. Fue entonces cuando la seguridad del Estado le dijo que no le dejarían salir del país.